A la espera del tratamiento de la Ley Lucio, Magnasco explicó que “más allá de la sensación de Justicia, a través de una condena de perpetua, que la sociedad esperaba, nos importa trabajar para que estas cosas no sucedan más porque el caso de Lucio era evitable”.
En ese sentido enfatizó que “si tan sólo la Justicia hubiera hecho el dos por ciento del trabajo que tenía a su cargo la jueza Ballester, no tengo duda que Lucio no hubiera tenido el desenlace fatal, después de tanta agonía”.
Sobre la ley y los protocolos de actuación dijo: “Yo creo que la ley va a ayudar, es necesaria, pero me preocupa quién va a dar las capacitaciones, porque el gran eje de la ley Lucio es llamar la atención a la sociedad para que se tomen en serio las denuncias, pero muy especialmente nos preocupa trabajar en las capacitaciones, quienes las darían”.
Porque “parte del resultado que tenemos con la jueza Ballester, muy probablemente esté vinculado a esta presión que existe en la justicia, que son los fallos con perspectiva de género. No sabemos por qué la jueza termina fallando de este modo, si es mera negligencia o inoperancia, será motivo de investigación, pero el resultado ha sido el mismo”.
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