Rosenthal contó que la “fábrica fue creada en 2015 en la ciudad de Balcarce y fueron muy difíciles los primeros años”. Actualmente 60 personas trabajan principalmente en la genética de las papas y en el desarrollo de sabores nativos (sin gustos artificiales) en conjunto con el INTA, añadió.
“Somos una empresa chica pero los clientes se llevan lo que fabricamos” explicó y resaltó que “hacemos un producto con plantas de ají y otras con tomillo, tenemos papas de colores que las exportamos” indicó el empresario.
La naturaleza del suelo y el clima hacen de Balcarce una de las mejores zonas para el cultivo de la papa. En el país se producen 3 millones de toneladas de papa en alrededor de 80.000 has y la PBA concentra el 55% de esa producción nacional.