HERNÁN CUEVAS: "SE EDUCA CON EL HUMOR"

Con humor y astucia contó de la fuerza necesaria para romper tabúes, y el rol del humor para educar sin estereotipos. "Nací en el 89´, cuando era chico y mis abuelos me decían algo, no había derecho a réplica, lo cual, por un lado está bien, pero por otro, no está tan bien, porque para los chicos de cero a diez años, no está bueno que no puedan decir lo que les molesta. Se educa desde la palabra, desde el valor, no se educa con una órden de manera autoritaria, para hablar de todo y con respeto", expresó Hernán Cuevas.

Uno de los protagonistas de "División Palermo", serie emitida a través de la plataforma Netflix, contó que desde la producción filmográfica, "lo hacemos todo el tiempo desde el chiste. En mi personaje Johnny, un chico de talla baja, en un momento, él tiene todo el tupé de decir: -che, me achicaron-".

Actor, director y dramaturgo recordó que siempre se imaginó "haciendo este tipo de productos" y piensa que a su vez, "siempre me daba bronca no tener un referente de la misma condición, o una persona que llame la atención, más allá de cualquier estereotipo y que pueda ser un referente", porque "siempre la gente diferente en la televisión o en el cine, es alguien que está estereotipado; dentro de un rol que por lo general juega la humillación o la denigración".

Comparado con el chico de talla baja en la serie de HBO "Juego de Tronos", explicó que, para romper con esa mirada, "esa serie que terminó hace seis o siete años", tuvieron que pasar "esos mismos años en Argentina, para que una serie tenga un personaje de talla baja", y romper con esa mirada estigmatizante del otro. Entonces, se dio cuenta que tras "esta situación", hoy en División Palermo, "funciono como uno más del equipo, lo cual nunca pasa", porque "ninguna minoría, y no lo digo sólo por mí, es triste, porque en definitiva, todos somos personas en el diario de la vida".

Cuevas agregó en ese sentido que "por eso empecé a hacer más teatro, para hacer las historias que yo quería, para no tener siempre el mismo estereotipo, y es triste cuando pasa eso. La sociedad ya no contempla este tiempo de situaciones, lo mismo en los realities como Gran Hermano. Hay una sociedad que condena ciertas actitudes o formas de ver, ciertos dichos, y por qué eso no puede pasar a la ficción, si eso ya está sucediendo".

Para finalizar apuntó contra "la inclusión forzada o marketinera, la que está usando el cuerpo del otro por una cuestión para su propia conveniencia". Por eso, "cuando salió División Palermo, me pareció un gol de media cancha porque no nos hacemos los boludos en lo que estamos contando, no hay analogías poéticas para entenderla", porque "hay una entereza de los personajes para poder contar y decir: -yo hago este chiste, yo me puedo hacer chistes, pero vos no te podes agarrar de mí para hacer chistes. Se educa con el humor, porque en definitiva, esta serie ya hace un mes que salió en Netflix y hace un mes que está entre las diez primeras más vistas", enfatizó Hernán Cuevas.

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