En la Semana de la Memoria, Miriam Lewin, periodista ex detenida desaparecida y Defensora del Público presentó el libro de investigación Skyvan que relata la historia de las aeronaves y los tripulantes de los vuelos de la muerte.
En No Corras, por FM 97 Une, recordó que la investigación nace en 2007 cuando es “abordada por un fotógrafo italiano, que por entonces vivía en Argentina y estaba obsesionado por encontrar los aviones de los vuelo de la muerte”.
“Me hace una entrevista como sobreviviente para el diario "La República" y me pregunta por este tema y a mí nunca se me había ocurrido que podía servir para algo ubicar los aviones y tripulantes de los vuelos de la muerte” reconoció la periodista y agregó: “Pero, el venía de una cultura donde los objetos eran importantes y estaba convencido de que dentro de los aviones había claves para identificar a los pilotos de los vuelos de la muerte”.
Seguido, relató que en los próximos días llegará al país uno de estas aeronaves. “La Nave había sido vendida por la prefectura, la ubicamos en el aeropuerto de Fort Lauderdale, EEUU en una compañía de aviación civil” describió y aseguró que “recuperar este avión es altamente significativo porque se descubrió que es la nave desde donde fueron arrojadas las monjas francesas y las fundadoras de Madres de Plaza de Mayo”.
“En el libro se encuentra la narración en forma de novela de lo que fue la identificación y la condena a prisión perpetua de los pilotos”, adelantó.
Por otra parte, la periodista reflexionó: “Los vuelos de la muerte fueron una metodología utilizada antes y después por otras dictaduras (…) y esto era muy perverso porque no sólo se pretendía hacer desaparecer a las personas sino todo su trazo y sus cuerpos”.
Lewin relató que en el caso de Argentina “los camiones salían de la ESMA rumbo al sector militar de aeroparque. Luego, subían a las personas adormecidas con pentotal a estos aviones usados por la prefectura pero que dependía de la marina para finalmente ser arrojados al mar”.
Asimismo, al repasar su paso por la ESMA, la exdetenida desaparecida recordó “nosotros no teníamos la certeza, pero todos los días se llevaban a las personas que estaban en el tercer piso del casino de oficiales con capucha, grilletes y los ojos vendados y les decían que iban a ir a un lugar donde iban a tener mejores condiciones de detención”.
“Sin embargo, a veces, después que se los llevaban nosotros encontrábamos sus ropas. Y a nosotros se nos decía que como se los habían llevado al sur, los habían trasladado con vestimenta adecuada” agregó Lewin que al mismo tiempo relató “tuvimos la certeza que no queríamos aceptar cuando un compañero es llevado por error a los vuelos de la muerte”.
En ese marco, aseguró: “Esto yo lo puedo parangonar sólo con lo que ocurría con los judíos. Y a la sociedad la confirmación le llega cuando empiezan a aparecer cadáveres en las playas argentinas y uruguayas”.
Y, por ello volvió sobre los hallazgos en las playas de Santa Teresita donde aparecen “los cuerpos de Azucena Villaflor, María Bianco, Angela Auad, militante de los derechos humanos y una de las monjas francesas, ya que el cadáver de la otra nunca apareció” y reiteró que al hacer entrecruzamiento de datos, planillas de vuelos y demás se llegó a la conclusión que uno de los vuelos del avión que en poco tiempo más vuelve a la Argentina coincide con la aparición, 7 días después, esos cuerpos y también con la última vez que las víctimas fueron vistas en la ESMA”.