Parte 1
Parte 2
Vanina Correa es una de las jugadoras referentes del plantel, con una gran trayectoria en clubes y el combinado nacional, que a sus 39 años se prepara de cara a la Copa del Mundo 2023 a la par de sus compañeras más jóvenes, con la mentalidad puesta en lo que será su cuarto y último mundial vistiendo la camiseta de nuestra selección.
Como parte de la preparación la Argentina venía de empatar, y posteriormente caer por penales, contra Venezuela en la provincia de Córdoba ante la presencia récord de 32 mil personas. Mientras que días más tarde vencería por 3-0 al mismo rival, pero en La Rioja y ante unos 10 mil espectadores.
Al respecto Correa señaló que “queda tan poco para la lista final del mundial que no se puede pensar en otra cosa. Toda esa gente que nos acompañó, nosotras teníamos ganas de jugar en Argentina. Ya lo habíamos hecho el año pasado y queríamos volver a estar cerca de nuestra gente, con casi 32 mil personas en Córdoba y otras 10 mil en La Rioja, para nosotras es un orgullo porque queremos poder demostrar las ganas que tenemos para que el fútbol crezca. Imaginate que, de estar en canchas vacías, con solo nuestra familia, a tener el estadio súper lleno. Saber que la gente nos acompaña nos da fuerza para lo que se viene”.
A pesar de la extensa trayectoria dentro de la Selección, que incluye además de mundiales Juegos Olímpicos, Sudamericanos y Panamericanos, la arquera confiesa que hoy no se detiene a pensar en lo que logró, sino que va más allá: “Voy viviendo el día a día. Sigo entrenando, tratando de mantenerme para entrar en esa lista final que va a ir al Mundial. Creo que una vez que pase este mundial creo que se me van a venir a la cabeza un montón de cosas que hice para estar ahí, las horas de entrenamiento o los largos días. Ahora estoy enfocada en lo que quiero hacer”.
Y agregó: “También estoy agradecida de tener la posibilidad de estar cerca de este cuarto mundial con Argentina. También he jugado Juegos Olímpicos y Panamericanos. Tengo una linda expectativa de este mundial, de poder hacer otro papel, regalándole un triunfo a la gente y a nosotras, o poder pasar de ronda y por eso creo que estamos más abocadas a lo que viene”.
Consultada sobre lo que representa el hecho que nuestra selección juegue su cuarto mundial consecutivo, Correa explicó que es algo que “siempre lo hemos hablado, que quizás nosotras no íbamos a ver ese cambio, pero sí queremos dejarle algo a las nenas que vienen atrás que van a ser el futuro del fútbol en la Argentina, para que puedan vivir de eso. Que tengan la posibilidad de prepararse, y elegir dónde y cómo quieren jugar, algo que nosotros no tuvimos la posibilidad”.
“Creemos que el cambio va a llevar unos años más, pero sabemos que estamos dejando el camino para que las que vienen lo puedan transitar tranquilas. Hoy nos toca a nosotras abrir esas puertas para las que vienen”, concluyó.