La Sociedad Argentina de Pediatría informa que este año “sólo hay inscriptos para el 50% de todas las vacantes nacionales. Es decir que aún si todos los profesionales están en condiciones de rendir, van a quedar el 50% de los cargos sin cubrir”.
En Mañana es Mejor, por Radio Provincia, el presidente de la entidad, Pablo Moreno reiteró que esta situación “la venimos advirtiendo y proclamando desde hace tiempo” y recordó que ya en “en el 2021 y 2022 quedaron vacantes el 30% de las residencias de Pediatría en todo el país”.
El especialista relató que la formación de un pediatra puede llevar entre “10 y 12 años” ya que la carrera de Medicina tiene entre 6 u 8 año de extensión de acuerdo a donde se la curse y “luego hay que agregar. la residencia que son 4 años más”. Y destacó que a esos 12 años hay que sumarle “dos años más de residencia” para “tener una especialista pediátrico” que también son muy buscados.
En ese marco, Moreno agregó que también se da que “hay un cambio en el ejercicio profesional de la pediatría que ocasiona que los médicos más jóvenes no la elijan y se decidan por otras especialidades más rentables o con menos sobrecarga laboral”.
Y por ello invitó a convocar una “una mesa de consenso para poner en marcha políticas a largo plazo donde participen todos los actores. El Estado, las Universidades, los Colegios Médicos y las Obras Sociales y prepagas” porque el problema es “multicausal” y se puede comenzar con la “cuestión económica, porque eso pesa y mucho en la elección de la especialización; pero también hay que pensar que es una profesión muy estresante y muy poco reconocida, incluso por la sociedad”.
Finalmente, en este contexto de escasez de profesionales y tenido en cuenta que “el trabajo de los pediatras aumenta todos los años en invierno por la circulación de los virus respiratorios” y que particularmente en este año “la curva fue antes de lo previsto”, Moreno le pidió a la comunidad “hacer un uso racional de los servicios de emergencia porque están sobresaturados”.
“El servicio de emergencia no es para tratar enfermedades diagnosticadas, ni para pedir un certificado para incorporarse al sistema educativo, es solo para emergencias (…) porque que una niña o un niño no sea atendido por un pediatra es una vulneración de sus derechos”, cerró.