"Todo lo que tenga que ver con “negro y peronista”, y sobre todo “negro” y después “peronista”, es una lectura programática que se desarrolla entre el siglo XIX y el siglo XX, donde cada uno queda excluído de la intelectualidad", expresó Fernando Bogado en diálogo con Enzo Maqueira. Y prosigió, "si uno se afirma negro y peronista no es intelectual, como una especie de ecuación y de doble privilegio que, de no ser precisamente negro, pero por otro lado, sí peronista, tiene negado la posibilidad del ser intelectual".
Esa imposibilidad de "tener intelectuales", "es la misma que se le negó al rosismo", donde sin embargo, "hay un montón de intelectuales rosistas" y literatura al fin, afirmó.
En su faceta de escritor, periodista y docente explicó que Perón fue un productor de cierta intelectualidad, evidente en textos que corresponden a la reflexión filosófica, en especial en -La comunidad organizada- es un material que reúne su pensamiento en las "Primeras Jornadas Nacionales de Filosofía". Por otro lado, expresó Bogado, no sólo es el pensamiento de Perón sino "el hecho de que haya un montón de intelectuales peronistas que no sólo van por el lado de Rodolfo Walsh o de Germán Rozenmacher, sino figuras no muy valoradas, que no aparecen como primera línea en los programas de literatura en las escuelas, hablo de Arturo Jauretche", por ejemplo.
En esa línea de intelectuales comprometidos con el movimiento peronista, Bogado dio cuenta también de Carlos Astrada, quien escribió “El mito gaucho” en la década del ´40; "alguien que venía del existencialismo heideggeriano y que encontraba en el peronismo la formula política y filosófica de un pensamiento nacional y popular". Entonces, "el mito del pensamiento nacional y popular no es un invento de Néstor Kirchner sino que es la recuperación de algo que ya estaba presente en el peronismo".
Bogado recordó a su vez figuras como la de Alicia Eguren compañera de John William Cooke. Sus textos fueron analizados por tres jóvenes bajo la dirección de Juan Santurian donde entre otros hallazgos, "revisan el fondo Cooke-Eguren, pensamientos filosóficos y escritos que ellos mismos enviaban a Perón. Hay una foto muy buena, donde después de la muerte de Cooke, Eguren está acompañada por Leonidas Lamborghini en el hospital. Es una línea que no ocupa un lugar en programas escolares o no en la reflexión contemporánea porque lamentablemente hay un estigma que tiene que ver con que el peronismo no está vinculado a la reflexión intelectual", detalló.
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