Esther Cross estudió Psicología, nació en Capital Federal, escritora, traductora, publicó dos libros de entrevistas, recibió premios. Escribió “Crónicas de alados y aprendices”, “El banquete de la araña” y hoy en Narraciones Extraordinarias hablamos de “La señorita Porcel”, un libro cuyos principales temas son la violencia y el poder.
Consultada sobre los aspectos de su escritura, Cross explicó que en temas como la oscuridad, ésta "está vinculada a algo que leí en -Misterio y manera- de Flanery O´Connor quién dice que más allá de escribir ficción, donde uno trata de despegándose del yo, uno escribe desde su personalidad, y a pesar de lo que uno querría que salga, son zonas misteriosas que hay que respetar, como misterio y enigma", expresó.
En diálogo con Enzo Maqueira y equipo, por AM 1270 Cross detalló que particularmente "lo que aparece en la señorita Porcel es ese lado dark". En cambio, en “La aventura sobrenatural”, otro de los libros de la autora, la muerte, aún siendo el momento en que se acaba la vida, "es violento" y tal como describe Simone de Beauvoir "es como un avión que se detiene en el aire".
Cross contó sobre su inicios como escritora y las trayectorias que atraveró. "Mi padre era profesor de Letras, tenía su biblioteca disponible, pero no quería que me guiara él. Así que mi formación fue a través de los libreros, mis grandes formadores y por entonces, no había muchos talleres, como los de Abelardo Castillo, Liliana Heker, Compay Grillo, buen coordinador y guía con muchos amigos escritores que invitaba al taller", destacó.
Para la escritora, el momento d ela escritura conlleva "distintos tiempos de un mismo momento". En ese sentido, se refirió a su particular modo de escribir: "En el momento en que estoy escribiendo, siento que está buenísimo lo que estoy haciendo, por eso le dedico tanto tiempo y entusiasmo. Después todo se relativiza. Y, en un segundo momento, se entiende que haya libros que hayan quedado postergados”, indicó.
Consultada por la literatura en su vida dijo: “Creo que hay un impulso y luego una decisión. Crecí en una casa llena de libros, donde las lecturas, y los libros eran fuente de muchísima felicidad, sentía que quería dedicarme a eso”. Además, explicó que habiendo dejado a un lado la carrera de Letras, no abandonó "la fascinación por la escritura y los libros que me gustaban". Aquello, "fue como una especie de parálisis", resaltó. Entonces, "dejé la carrera porque sabía que quería escribir, empecé Psicología y un taller de literatura”, enfatizó Cross..
Por último, dijo: “Soy una rata de biblioteca, me gusta leer ficción y ensayos literarios, pero cualquier lectura es bienvenida, y en Psicología, leer a Freud era leer autores que te abrían la cabeza”. Esta novela - "La señorita Porcel", "la escribí de un tirón, gané un concurso, pero no la corregí tanto, porque la obsesión por corregirla me hace quedarme en los primeros segmentos, la primera versión tiene que estar asegurada, aunque luego cambie muchísimo", aseguró.
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