La secretaria de Energía de la Nación, Flavia Royón, habló con Todo Este Ruido por Radio Provincia y dijo que “estamos abocados a avanzar con la licitación de lo que llamamos la reversión del norte. Este gasoducto ya existe, pero tiene un sentido de flujo de norte a sur, donde se toma el gas de Bolivia, abastece al norte argentino y llega al centro del país. Lo que nosotros buscamos ahora es que el gas de Vaca Muerta llegue al norte del país y no necesitemos importar de Bolivia, así como también la licitación del segundo tramo del gasoducto que une Buenos Aires con Santa Fe y con la unión de los dos sistemas distribuir el gas a nuestro mercado doméstico”.
Asímismo, contó que ya se envió al Congreso, el proyecto de ley de GNL, porque entendemos que con nuestro mercado doméstico abastecido podemos empezar a pensar en proyectos de GNL, así como también en plantas de fertilizantes que le hacen agregar valora Vaca Muerta”.
Además, indicó que “para este año el impacto es de alrededor de U$D 1.700 millones. Siempre se toma en el ahorro de importaciones. El precio del gas del GNL también es un precio volátil, pero también el ahorro en subsidios. Y para el año que viene, el ahorro estimado es de cerca de los 4 mil millones de dólares”.
Sobre cuál es el impacto del gasoducto, explicó que “hoy Argentina tiene un problema económico, temas de inflación, de disponibilidad de dólares, y para poder crecer y poder desarrollar la industria se necesitan importaciones y ahí necesitamos dólares. También debe aspirar a industrializar y a generar cada vez más industria. Y el gasoducto impacta en todo esto., en bajar el gasto público porque el gasoducto posibilita gas más barato de Vaca Muerta. En materia de disponibilidad de dólares de divisas, este gasoducto no tan solo nos ahorra no tener que importar gas sino que el desarrollo de Vaca Muerta posibilita la exportación tanto de gas como de petróleo porque el desarrollo de Vaca Muerta nos va a dar más gas y más petróleo para exportación. Y así el sector energético en muy poco tiempo va a posibilitar tener una balanza negativa. Es decir, hacia el 2030 esto puede ser positivo en U$D 18.000 millones y que no dependamos únicamente del sector agroindustrial para la generación de divisas”.
“Y también, el desarrollo de toda una economía, porque un país que tiene independencia energética, que puede autoabastecerse en materia energética, garantiza un pilar fundamental al momento de evaluar cualquier tipo de proyecto industrial, que es el acceso a la energía a precios predictibles y que no dependa de crisis internacionales. Que sea un sistema robusto”, aseguró.
No obstante, precisó que “Argentina es un país bendecido en recursos naturales. Vaca Muerta es la segunda reserva de gas no convencional del mundo. Pero para que este recurso pueda ser traducido en riqueza y que sea puesta al servicio del crecimiento de un país, se requiere visión, decisión política, porque lo que buscamos es la generación de miles de puestos de trabajo. Para eso necesitamos apostar a una infraestructura como la que es este gasoducto”.
Sobre las declaraciones de Mauricio Macri, que dijo que esta demora en la construcción del gasoducto le costó a Argentina más de U$D 5.000 millones y que su gobierno había dejado la licitación lista en el año 2019, opinó que “cuando uno construye el gasoducto tiene que regular cuál va a ser el destino. Este gasoducto y el proyecto que nosotros llevamos adelante es lo que se llama la demanda prioritaria, o sea, el uso residencial, el uso de usuarios y el sistema eléctrico. La energía eléctrica se genera de diversas fuentes, renovables, hidroeléctricas, pero la principal fuente es lo que se llama la energía térmica, que son combustibles líquidos y el gas natural. Nosotros lo que apuntamos es que el recurso sea puesto primero en beneficio de nuestro país y de todos los argentinos y argentinas en garantizar el gas al mercado interno, a la industria y al sistema eléctrico. Y después, en todo caso, si hay algún excedente en la exportación, pero no al revés. Y la propiedad del activo es del Estado Nacional, porque el Estado Nacional está llevando adelante esta inversión con esta visión y con este proyecto de desarrollo. No estamos pensando hoy en que esta red de infraestructuras tenga como destino la exportación, sino primero está el mercado interno, primero está la generación de energía eléctrica y en todo caso si hay algún excedente en verano se habilita la exportación, pero no al revés. Este gasoducto es de propiedad del Estado Nacional, se hizo 100% con recursos del Tesoro y el transporte va a estar a cargo de empresas del Estado Nacional”.
En la misma línea, remarcó que “en el mes de mayo se rehabilitó, después de 17 años que no se utilizaba, el oleoducto que nos conecta con Chile y se comenzó a exportar crudo. Y también se está trabajando, con inversión privada en la ampliación del sistema de Oiltanking y de Oldelval para poder triplicar las exportaciones de crudo de Argentina”.
Para terminar, mencionó que el país “está recibiendo un récord de inversiones en el sector de hidrocarburos, cerca de los 1000 millones de dólares. El año pasado estuvo en alrededor de U$D 6 mil millones y este año cerca de los U$D 8 mil millones, más lo que están invirtiendo en materia de infraestructura, en materia de oleoductos. Hoy hay un récord de inversión en este sector”.