El docente, archivista y licenciado en Historia (UBA), Andrés Pak Linares, jefe del departamento Archivo Intermedio del Archivo General de la Nación y presidente de la Asociación de Archivistas en la Función Pública Argentina, conversó con Sergio Wischñevsky por AM 1270.
En diálogo con Historia Nocturna explicó que a pesar de los esfuerzos, “Argentina no tiene una política estatal en materia de archivos sostenida en el tiempo”.
En tal sentido expresó que en los últimos 40 años de democracia “han habido iniciativas" como "el reclamo de los profesionales archivistas" donde "podemos encontrar líneas de acción o una política interesante de tejido de redes".
Sin embargo, sostuvo que lo que no existe es el "reconocimiento profesional o recursos económicos para los archivos, más ahora con la revolución tecnológica, esa sería la postura de archivistas de ASPA que es la asociación que integró", puntualizó.
El Archivo General de la Nación nace como archivo de la Provincia en 1820 por iniciativa de Bernardino Rivadavia. A partir del proceso de organización nacional, en 1884 se transforma en archivo de la Nación.
Pak Linares destacó a su vez que "en el momento de su creación, con Rivadavia tenía un sentido mucho más moderno que el que fue perdiendo con los años, porque en general los archivos se entienden son para historiadores pero desde la archivística contemporánea entendemos que los archivos tienen una triple función social".
Por un lado, "el mismo documento puede servir para el conocimiento del pasado, para alguien que le interesa conocer el pasado", en segundo lugar, "es testimonio del derrotero y de la institución que los produce" y por último, "el rol de los archivos en la sociedad es para el ejercicio efectivo de los derechos individuales y colectivos".
Es decir, "los documentos de archivos contienen información que hay que sacar del sentido común del archivo de reservorio para los historiadores" y observar por ejemplo que son documentos de utilidad para sentencias de juicios "para lo que fue la Masacre de Napalpí o para la causa de la Masacre de Rincón Bomba, de los pilagá".
Por último, destacó que "todas las semanas respondemos algún oficio judicial que tiene que ver con causas de Lesa Humanidad". Algunas búsquedas son "más sensibles, con una carga política y emocional muy fuerte", y otras, "comunes, como genealogías", detalló.