El actor argentino Luis Machín conversó con Revolución Solar por AM 1270 sobre su obra, “La última sesión de Freud”, una pieza que indaga los textos Freud y sus últimos días de vida tras una larga enfermedad.
Con actuación de Javier Lorenzo en el papel de Clive Staples Lewis, con dirección de Daniel Veronese, Machín busca que el humor se desprenda de Freud y sus escritos. "Es un humor que está vinculado a cierto filo ácido, un humor inteligente, y la gente eso lo disfruta mucho", expresó.
Enmarcada en la última sesión de Freud, la obra que se presenta este sábado en el Teatro Coliseo Podestá, está enmarcada en el comienzo de la Segunda Guerra Mundial, "precisamente cuando Inglaterra le declara la guerra a Alemania", detalló el actor.
Allí, los espectadores/as encontrarán a "Clive Staples Lewis, un escritor católico que se encuentra con Sigmund a discutir", puntualizó Machín. "Freud, se sabe, gustaba de entrevistarse con gente que pensara muy distinto a él, y exhibir su histrionismo. Era una persona que tenía un humor muy particular", enfatizó.
Por último, dijo que "la palabra tiene un lugar muy preponderante. Se exponen ideas muy distintas, como la ciencia y la religión, si hay vida después de la muerte, temas que todos nos hemos preguntado en algún momento de la vida, expuestos desde un lugar de convencimiento muy fuerte por cada uno más allá de las profundas diferencias".