El politólogo Julio Burdman analizó el protocolo anti-piquete que hoy se estrenó con la primera movilización en el gobierno de Javier Milei.
En diálogo con Esa Hora, por Radio Provincia, afirmó que no se puede determinar su eficacia o no por cuanto se aplicó “ante un sector reducido de las agrupaciones sociales vinculadas a la izquierda, porque las cercanas al ex oficialismo no han salido. Habrá que ver cuando haya otro tipo de movilizaciones”.
Consideró que “son medidas para tratar de inyectar en buena parte de la población el temor a la sanción que dudo que después sea tan efectiva”. Al respecto, señaló que “desde 2001 en adelante todo lo vinculado a los movimientos sociales que cortan calles siempre pendió de cierta ilegalidad. El debate que han dado muchos en torno a la legalidad de la medida cae en saco vacío porque está cuestionada hace mucho tiempo”.
Consultado sobre cómo ve a Milei en lo que va de su gestión, manifestó: “Los primeros momentos de un presidente son de alta imagen, porque el 56% que lo votó no tuvo tiempo todavía de cambiar de opinión. Probablemente el 44% esté más convencido de no haberlo votado. Creo que recién en marzo vamos a ver cómo le ha ido en términos de la opinión pública”.
Opinó que “estamos ante un gobierno de una extraordinaria audacia y determinación. No estamos acostumbrados a esto porque es un concepto de shock real. Es un gobierno determinado a ir adelante con sus convicciones, aun si tiene que adaptarse”.
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