En diálogo con Todo este ruido por Radio Provincia AM1270, Arroyo calificó esta etapa como “histórica” debido a que“hay un intento del gobierno en transformar el funcionamiento y las reglas de la economía, de la sociedad, del Estado y del mercado”. En ese sentido, consideró que “el decreto de necesidad y urgencia es claramente inconstitucional ya que deroga y transforma 300 leyes, pero en esencia reformatea el esquema de relación entre el Estado y el mercado. Es decir el Estado se corre absolutamente y es el mercado a lo bestia”.
Luego detalló que de ser aplicadas las normas planteadas por el ejecutivo nacional “cada uno cobra lo que quiere” y nadie regula “la tarjeta de crédito, la medicina prepaga”, entre otras. “La Ley Ómnibus tiene la misma característica. Son 600 artículos con cambios de todo tipo; la fórmula para calcular los haberes de los jubilados, la reforma electoral, las retenciones, la salud mental, el tema educativo y todos los planos” y puntualizó “tiene un artículo que es brutal y es el que le delega la suma del poder público al Presidente”.
A continuación, indicó “mi impresión es que más que un proyecto de ley es una tesis universitaria, es decir ‘vos ponete a escribir lo que te parece sobre cómo funciona el Estado y el mercado’, entonces ‘a partir de mañana esto quiero que sea así’. Es eso en esencia”, graficó, para luego acotar: “No vieron la fragmentación política que está reflejada en el Congreso de la Nación. Entiendo que es muy difícil para el radicalismo votar la privatización de YPF o de Aerolíneas Argentinas, o que alguien con tradición republicana al estilo de la Coalición Cívica pueda votar delegación de funciones. Me parece que subestimaron ese esquema”.