“El Jefe” dialogó desde España en Instinto Amateur y manifestó su decisión de dejar de jugar como profesional al pádel .
“El tema de los apodos me enganchó de grande por la aparición de las redes sociales. Hoy hay mucho halago fácil. No le doy mucha importancia, soy un tipo normal que hace su profesión y tengo claro que dura sólo un tiempito”.
“Este es el último año que quiero jugar. El cuerpo me ha dado la posibilidad, gracias a que lo he cuidado toda la vida, de llegar haciendo el deporte a los 45 años que cumplo en mayo y todavía estar compitiendo con chicos de 20. Quiero cerrar este año que cumplo 30 como jugador profesional”
“Quizá estoy para jugar un par de años más pero nunca fue mi idea de jugar por la plata sino que cuando voy a las competencias quiero tener la posibilidad de ganar. Hoy por hoy todavía quedan algunas chances de poder hacerlo frente a los mejores. Esa es una linda sensación y no que el que esté enfrente piense que aunque juegue mal igual me gana”.
“Otras de las razones por lo que he decidido que es mi último año es que mis hijos entran en la adolescencia y quiero estar en mi casa para todo lo que se presente. Tengo 3, Federico de 15, Sofi de 13 y Bea 10 años. Las chicas juegan al tenis desde los 5 años, Fede hizo tenis desde los 5 hasta los 13 y ahora está jugando al pádel porque así lo decidió. En mi casa el deporte y el estudio son innegociables”.
Belasteguín se hizo profesional muy joven y recorre los comienzos del deporte en nuestro país y luego emigrar para seguir su desarrollo.
“Juego al pádel desde 1989 en la época que en Argentina fue furor, debuté profesionalmente en el ´95 con 15 años y hoy día sigo teniendo las mismas ganas e ilusión de ese pibe que arrancó hace casi 30 años. En Argentina había comenzado a decaer el deporte a fines de los ´90. Me vine a España hace 24 años, quería jugar contra los mejores y la mayoría estaban acá”.
“Este es un deporte que se juega en pareja. En mi caso tengo récords muy lindos y es porque tuve al lado gente igual o mejor que yo porque en un partido le tiran todas las pelotas al más malo y si los dos no son buenos no se gana”.
Cambio de pareja para jugar el último circuito como profesional.
“Este último año elegí de compañero a “Lucho” (Luciano) Capra que cuando lo llamé me dijo que sí y que le entusiasmaba mucho el proyecto. Él es de Quilmes y estamos entrenando desde el 8 de enero. Yo estoy con un problemita en el codo que lo vengo arrastrando desde fines del año pasado pero espero que en unos días mejore. La verdad estoy con una ilusión muy grande. El circuito comienza en Riad el 26 de febrero y desde ahí nos vamos a Doha”.
La vida de “Bela” fuera del deporte.
“Tengo una familia muy linda y sana. Sigo el vínculo familiar en Pehuajó porque me defino como un “pehuajense” que vive en Barcelona. A pesar de los años que llevo viviendo en España mi corazón está en Argentina. Sigo manteniendo mis amistades en Pehuajó, eso me hace sentir orgulloso y me permite disfrutar de las misma cosas como si nunca me hubiera ido”.
“Con la ciudad de Bolívar tengo una relación especial porque a los 18 años comencé a estudiar Ciencias Económicas en una sede de la Universidad de La Plata. Iba Los sábados y domingos y lo compaginaba con el deporte. Inicié una muy linda relación con la gente del Club “El Corralón”, Matías Ortiz y su familia, también con el “Gallego” Pérez y que me ofrecieron poner mi nombre a la escuelita de chicos especiales que están trabajando hace 25 años. Siempre que voy a Pehuajó me paso unos días por Bolívar que comparto con los chicos”.
En 2015, y coincidiendo con el día de Sant Jordi, Fernando Belasteguín lanzó a la venta su biografía, titulada “Esta es mi historia”, cuyo prólogo está escrito por el ex - jugador del Fútbol Club Barcelona Andrés Iniesta. El libro está escrito por Valen Bailon y tiene una función solidaria, puesto que su recaudación se destinara a varias causas benéficas: Fundación infantil Ronald McDonald’s Barcelona, Panadería “El futuro de Pehuajó”y la Escuela especial de Pádel “Fernando Belasteguín”.
“Con Iniesta tenemos un amigo en común y cuando me escribieron el libro lo comenté y fue así que tuvo la buenísima idea de escribir el prólogo. También tengo una muy buena relación con Carles Puyol porque sigo siendo un loco del deporte en general pero gracias al pádel he podido conocer a grandísimos deportistas”.