En diálogo con Revolución Solar, dijo que la decisión parte de un “falso nacionalismo absoluto” que expresa el gobierno de Javier Milei que “le puso el cartel de venta a la Argentina y pone en manos de multinacionales los recursos nacionales”.
Sobre Kasanzew, que fue el único corresponsal de guerra argentino que cubrió el conflicto con Gran Bretaña, dijo que se trata de “un personaje nefasto, la cara visible de la dictadura en la guerra de Malvinas”.
Agregó que se trata de “una persona que es repudiada” por distintos sectores sociales: “un tipo que plantea que hay un enemigo interno que son los pueblos originarios”. Esa ideología “ya la vimos en el gobierno de Macri, con la actual ministra Patricia Bullrich”
Alonso recordó que hay más de 200 soldados que denunciaron ante la justicia que sufrieron torturas y abusos en Malvinas por parte de los jefes militares.
En ese marco, cuestionó la reivindicación que hace la vicepresidenta Victoria Villarruel sobre su padre: “No se puede ser héroe y represor al mismo tiempo” y recordó que también “se levantó contra la democracia porque fue un carapintada”.
“La guerra fue lo peor que nos pasó a los argentinos” y ahora “aparecen estos mamarrachos de la mano, nada más ni nada menos, que de la vicepresidenta de la Nación”, enfatizó Alonso, al tiempo que lamentó el enorme retroceso que estas posiciones implican para el país.