Pedro Borgini, secretario General de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA) de La Plata y senador provincial, habló por La Mecha en Radio Provincia a raíz del paro que realiza, este jueves, el sector luego de no lograr avances en las negociaciones salariales.
En ese sentido, recordó que en diciembre de 2023 recibieron “un aumento del 34%” con la condición de reunirse en el mes de enero para hacer una revisión. “Mantuvimos el diálogo y la parte empresaria entregó un bono de $70 mil ante la posibilidad de una medida de fuerza. En febrero no pudimos conseguir nada y los empleadores dicen que no pueden pagar un aumento, la situación de los trabajadores de la salud siempre es problemática, pero en este contexto mucho más”.
Asimismo, indicó que el sector empresarial mantuvo reuniones “con las prepagas y reciben por las prestaciones que dan pagos de las obras sociales provinciales y nacionales como es el caso de PAMI-IOMA”. Por ello, señaló que “se “ha deteriorado mucho el salario del trabajador y más allá de lo que exponen ellos sobre que tienen que pagar insumos carísimos en dólares y si no las clínicas no podrían funcionar, sin trabajadores bien remunerados, que no pueden llegar porque no les alcanza para pagar el transporte, tampoco podrían trabajar”.
No obstante, Borgini mencionó que está garantizada “una cobertura de guardias mínimas, con enfoque prioritario en las emergencias. Las cirugías y la atención en consultorios quedan suspendidas en todas las clínicas privadas del país, sanatorios, psiquiátricos, geriátricos, empresas de emergencias”.
Sobre la relación del Gobierno nacional con los gremios, expresó que “hay un objetivo que es ir hacia déficit cero y no le importa nada, pero en el medio está la gente. Generaron una devaluación fenomenal y los salarios quedaron muy abajo. No atacaron a la casta sino a los trabajadores y a los de menos recursos”. Y agregó que el peor escenario “está por venir porque aún faltan los aumentos de los servicios. No sé en qué piensa la gente que trabaja con él, pero el pueblo no da más y la conflictividad va a ir en aumento de acá hasta abril”.
Sobre la desregulación del as obras sociales, opinó que “ya lo vivimos con Cavallo (Domingo, Ex Presidente del Banco Central) y ahora quieren hacer lo mismo y profundizar esa situación. Hoy un trabajador paga el 3% de su salario más el 6% que pone el empleador, unos $40/50 mil para su obra social. En caso de ir a una prepaga deberá pagar arriba de los $100 mil, algo imposible con estos salarios. Por eso estamos viendo el decreto que ayer salió en el Boletín Oficial”.
Finalmente, precisó que “si los sindicatos no ayudan con sus aportes a las obras sociales no podríamos dar cobertura desde el lado sindical. La caja de la que hablan no podría existir si no fuera porque los gremios aportan a las obras sociales para que puedan funcionar. Hay un ataque premeditado hacia los sindicatos y los trabajadores. Este tipo de gobierno lo que quiere es que no haya sindicatos, precarizar el trabajo, como lo hicieron con la discusión del salario mínimo".
Está todo armado para no darle aumento a los trabajadores y que un grupo selecto de ellos ganen fortunas, así el sistema financiero está de fiesta. Seguramente habrá otro paro a nivel nacional, los conflictos individuales están en aumento, los trabajadores no dan más, así que la CGT irán en un tiempo muy corto a otro paro”, sentenció.