El jugador tras desplomarse sufrió convulsiones, fue trasladado a una clínica donde lograron compensarlo pasando una buena noche. Hoy se lo trasladó a otro nosocomio para realizarle estudios complementarios.
Ante esta inusual situación el Dr. Ignacio Flores brindó detalles en el Deportivo 1270 de lo que pudo haber generado el evento.
“No conozco la situación clínica en particular del jugador pero podemos aprovechar para explicar un poco cómo funciona el cerebro y qué es una convulsión. En el cerebro hay actividad eléctrica permanente y cuando se produce una convulsión lo que se produce es un serie de mecanismos bioquímicos que irrumpen y modifican el sistema eléctrico del cerebro en un área específica o generalizada”.
“Hay un foco en una zona pequeña zona del cerebro que puede propagarse y generar lo que llamamos una convulsión. Nosotros le llamamos “crisis” porque hay algunas que se manifiestan de esta manera con movimientos involuntarios del cuerpo y también puede ser una manifestación epiléptica. El caso más normal es cuando el paciente se desmaya y hace movimientos anormales por algunos minutos y luego queda en un estado que se llama “período confusional postictal”, en el cual el paciente no reconoce el entorno y luego vuelve a la normalidad”.
En los casos que se producen convulsiones habitualmente se piensa en epilepsia.
“Hay que destacar que la epilepsia es la posibilidad de reincidencia de ese evento. Es importante aclarar que hay muchas personas que tienen una crisis durante su vida y luego no las reitera, Hay múltiples causas que pueden generar una crisis aislada por ejemplo por padecer restricción del sueño. Eso sí cuando reincide o se tiene una alta sospecha clínica a eso se le denomina epilepsia”.
“Para diagnosticar la epilepsia hay que estudiar las chances que tiene el paciente de reincidir en una convulsión. En el caso de Altamirano tiene un alta demanda física y quizá haya otros gatillos que generaron esta situación, pero también hay deportistas epilépticos que tienen una medicación específica para controlar. Cuanto más stress le agregues al cuerpo más difícil es la regulación de la enfermedad. El control evolutivo va a ser más complejo”.
Los estudios para detectar lo que causó la situación convulsiva.
“Se hacen una serie de estudios. Lo primero que se hace es un electroencefalograma para monitorear la actividad eléctrica cerebral a través de una neuro - imagen que en este caso se le hicieron una tomografía ayer y ahora una resonancia magnética. A partir de ahí se plantea un escenario si hay alguna condición que le esté generando esa propensión a tener una convulsión que puede estar dada por una lesión que aparezca en el cerebro o cualquier otra situación clínica”.
“Pero si la situación es que no se encuentra nada anormal en los estudios pero es propenso a sufrir convulsiones, podemos predecir que este paciente sin ningún tipo de gatillo clínico sin ninguna complicación va a volver a sufrir el evento y es el paciente que generalmente medicamos por un tiempo mayor a dos años”.
Este tipo de situaciones clínicas son o no detectables en los estudios que hacen los clubes?
“Generalmente no. Hay estudios complementarios que se realizan que pudieran detectar algo pero a veces salen normales y no lo se puede saber hasta que no vuelva a suceder el evento. La primera crisis de un paciente epiléptico es normal hasta que la presenta. El diagnóstico en la mayoría de los casos termina siendo clínico. Entonces estamos hablando de una epilepsia estructural que la indican los estudios pero también existe la epilepsia genética donde la persona tiene una vida normal hasta que ocurre el evento y no hay forma de detectarla antes”.