En diálogo con Revolución Solar, la directora del Museo de la Memoria Laura Ponisio comentó que la idea surgió “a partir de la búsqueda de artistas, sobre todo grabadores, y dibujantes, que tienen muy en cuenta la realidad social y la época donde viven”. En ese sentido, se procuró seleccionar obras que “cuentan, relatan, y desafían el presente”.
Ponisio agregó que “el arte en este país desde hace muchos años, como en los 90 o en el 2001, salió a la calle. Las temáticas de las obras, siguen sin resolverse, tenemos que pensar qué hacer y cómo salir de esto”.
Seguido, tras puntualizar en la presencia de imágenes en las obras que contienen manifestaciones, ollas populares, mencionó que “las obras de artistas que han dado una fuerte respuesta en los 90 y en el 2000, es el tema de la vigilancia, la violencia, la persecución de los estados, el ojo que mira y controla, cosas de las que es muy difícil salir y cambiar. El conjunto de la muestra está pensado para construir y ver cómo se puede construir con unidad un proyecto que tenga más dignidad para las personas”, concluyó.