Santiago Corzo, doctor en Ingeniería Mecánica e investigador del Conicet conversó con Todo Este Ruido y analizó las partículas que liberamos al hablar ya sea en auto o en transporte público.
Corzo señaló por Radio Provincia que “los estornudos pueden viajar hasta dos metros, pero esas partículas al ser más grandes son frenadas por cualquier barbijo. Las partículas más pequeñas, pueden ser transportadas por el aire y eso se soluciona abriendo ventanas”.
Asimismo comentó que han hecho “simulaciones en el auto a velocidad baja y con 30 segundos, el aire se renueva con todas las ventanas abiertas”.
Por este motivo, aconsejó Corzo que “hablar es muy distinto a respirar, eso genera más partículas y por eso en el colectivo hay que hablar lo menos posible”.