El licenciado en Ciencias de la Educación y director de www.foro21.com.ar una productora de proyectos educativos para Latinoamérica, Diego Manusovich reflexionó sobre las nuevas medidas sanitarias dispuestas para frenar la segunda ola de Covid 19 y aseguró que en este contexto “lo que más lastima es la tensión entre la libertad individual y social”.
En Siete Colores, por FM 97 UNE, el autor de "El Pedagogo", aseguró que “La vida moderna nos ha embaucado. Nos hizo creer que todos podemos hacer lo que queremos, ya que la única limitante es el dinero”.
“Están tan ampliadas la libertades aparentes que todos tenemos como ciudadano, sobre todos los que tenemos más privilegios, que cuando nos intentan hablar de lo comunitario, nos resulta tan extraño y alejado a la cotidianidad, que nos genera hastío. Y nos preguntamos ¿Cómo un Estado, un gobierno va a decirme lo que tengo que hacer si soy un hombre libre? Sin pensar que también somos un grupo humano que debe cuidarse a sí mismo” describió el especialista.
En ese marco, Manusovich relató que en la vida moderna “A pesar de que uno vota, cada 2 años, la sensación que prima es que uno hace lo que quiere. A pesar de que es el representante elegido el que guía al conjunto. Y ahí hay una contradicción. Hoy lo que está en tensión es la propia democracia”.
Manusovich detalló: “Hoy se cree que estas libertades de las que gozamos son realmente condiciones que fortalecen las decisiones de cada uno y nos olvidamos que hay un otro, que no es mi familia, que está más cerca o más lejos y al que también tengo que proteger. Y si no cerramos el AMBA, esta situación luego llega a las Provincias y puede molestar, matar. Sin embargo, la percepción de ese otro,no es algo que está dentro de la visión del capitalismo”.
“Y en las sociedades modernas esto ocurre, cuando se deja correr al capitalismo, al mercado como ordenador de la vida social. Hoy en la escuela nos enseñan materias y nos preparan para que podamos competir por un puesto de trabajo. Pero no nos preparan como humanos y para entender que todos somos parte de una sociedad y nadie puede estar afuera. Y estas cosas pasan porque no tenemos conciencia, sensibilidad colectiva" describió.
Y concluyó: "Todo es superables, ya hay problemas, hay regresiones psicoafectivas, sociales, educativas y todo esto genera un gran problema. Pero estos son problemas sociales y educativos que van a a tener una repercusión, en el futuro, que será mínima porque está en función de la muerte que es lo único que no tiene solución. No hay retorno de la muerte, si de una escolaridad tardía".