En diálogo con La siesta es sagrada, Teruggi manifestó “a esta altura con 5 meses de gobierno y cerca de 6 crisis diplomáticas, me parece que hay un patrón y no se puede pensar que son errores o exabruptos”.
En ese sentido, amplió “me parece que es parte de una política pensada que tiene varios objetivos: en primer lugar se está proyectando a nivel mundial como líder de una corriente política, y eso lo asocia con una postura muy rupturista pensando que puede pelearse con mandatarios y sostener negocios” y a la vez “se está paseando por el mundo poniendo al país en venta”.
Respecto a las posibles repercusiones sobre las agresiones permanentes de Milei a mandatarios de otros países, planteó que “la zona de apuesta de Milei es poder realizar todo esto y mantener los negocios” pero que “teniendo en cuenta la reacción de los empresarios ante lo que pasó, los negocios necesitan marcos legales” que a la vez “piden estabilidad política y eso es algo que Milei no puede garantizar”.
Seguido sostuvo que la del gobierno libertario, “es una diplomacia presidencial, la canciller ocupa un rol secundario”, recordando que “Milei cuando asumió invitó a Jair Bolsonaro y no al presidente en ejercicio, del país que es el principal socio comercial en el continente. Habrá que ver hasta dónde podrá sostener esta estrategia de acumulación a futuro”, cerró.