El cocinero Damián Cicero recorrió su historia al frente de las hornallas que comenzó “desde muy chico, cuando tenía 7 ú 8 años”, aunque “profesionalmente desde los 18”. Expresó que llegó a la cocina producto de la influencia gastronómica de su familia, que “enseguida me ubicó en un puesto para tener una salida laboral”. En tal sentido, dijo que como la mayoría “empecé en la bacha, y con esfuerzo pasé por todos los puestos hasta llegar a la alta cocina”.
Más tarde, reflexionó que “la bacha te enseña a comer porque te encontrás con lo que vuelve y el que está en la bacha prueba porque lo necesita, ya que está en el puesto más bajo de la escala salarial, está en un horario difícil, y además conoce lo que cocina cada compañero”.
Al ser consultado sobre cómo se convirtió en especialista de la cocina española, manifestó que “en 1997, el chef español Joan Coll y Joaquín Alberdi relanzaron el Casal de Catalunya”. Si bien “lo habían convocado a mi hermano, él rechazó la oferta y me propuso a mí. Ahí también comencé en la bacha pero Coll me enseñó todo sobre la comida ibérico-catalana y estuve en el lugar 24 años”.
El ‘Mono’, como se lo conoce, llegó más tarde a la televisión, que “me cambia un poco el rumbo porque me da difusión”. Sostuvo que “empecé en C5N, en programa que se hacía de 0 a 5 AM con Roberto Funes Ugarte, que es un genio haciendo televisión”. Luego, indicó que “estuve los últimos 5 años de Cocineros Argentinos, lo que pareció una experiencia maravillosa y una cosa enorme porque el programa ofrece un servicio al dar a conocer un producto, recetas y a todas las cocinas de argentina”. Según consideró, “es la más linda experiencia que tuve, fue una tarea social y eso llena mucho”.