En diálogo con El Repaso, el médico y dirigente comentó que garantizar los servicios de guardias de emergencia, “es uno de los temas sanitarios de la última década”, y que “está más que claro que en el último tiempo han crecido enormemente las dificultades para poder contar con recursos humanos formados para las asistencias” ya que por cuestiones salariales “es menos elegido y buscado por los profesionales”.
Seguido, añadió que “a partir de diversas presentaciones planteadas desde distintos espacios ligados a la defensa de los profesionales de la salud” y a partir de un proyecto de ley impulsado por el ex diputado y ex ministro de Salud bonaerense Daniel Gollán, “quedaron eximidos formalmente de tributar impuesto a las Ganancias”.
Tras aclarar que la disposición del gobierno nacional alcanza además a personal técnico, dijo que algunos profesionales de la salud podrían elegir no hacer guardias extras “porque al pasarse del piso establecido uno termina trabajando más, pero recibiendo menos salario, porque se encuadra dentro del descuento”.
Luego, manifestó que “esta situación ameritó un tratamiento de excepción hace cortísimo tiempo, porque es una cuestión sanitaria central”, enfatizando que “en el caso de la accidentología, todo prácticamente está a cargo de las guardias de los hospitales públicos, ya que las clínicas privadas no tienen cobertura de accidentología en ruta o siniestros viales”.
En función de ello, “está claro que un dispositivo que ya venía en crisis y ameritó una intervención previa hace 2 años”, en este contexto “es casi ponerse a bailar sobre la tormenta perfecta de algo que ya viene crujiendo”.
Por eso, advirtió que “tiene que haber intervención por parte del Estado para poder sanear y optimizar” al sector, “preservando el derecho a la atención de la población. Hacer esto en este contexto, es prácticamente volver a dinamitar un dispositivo esencial para la asistencia, para la cual venimos haciendo grandes esfuerzos y que pueda funcionar correctamente”.