La expresidenta Cristina Kirchner declaró esta mañana en Comodoro Py en el marco de la causa que investiga el intento de asesinato en su contra en 2022 y que tiene como principal acusado a Fernando Sabag Montiel.
En el marco de su declaración ante las preguntas de la querella, la ex mandataria acusó al “partido judicial, de no investigar y dar sólo con los autores materiales del intento de asesinato”.
La ex vicepresidenta, afirmó que "los episodios de violencia" dirigidos a su personas comenzaron "después de la pandemia".
Desde entonces, dijo,"fueron in crescendo". Entre ellos, recordó "las guillotinas en la Casa Rosada" y las "bolsas mortuorias" y también "la destrucción de mi despacho el día que se discutía el acuerdo con el FMI".
Remarcó que si bien "era clara nuestra postura en contra (del acuerdo), sin embargo, apedrearon mi despacho que, está probado, que había sido marcado". Y agregó que "lo curioso es que durante 30 minutos apedrearon y destruyeron el despacho y ni la Policía de la Ciudad ni la Federal en ningún momento lo evitaron".
En otro pasaje de su declaración Cristina recordó que "cuando era presidenta, durante los dos períodos sufrí violencia simbólica" por su condición de "mujer".
En este sentido, aportó tapas de medios periodísticos como la revista Noticias, en los que la atacaban por su género. "Hasta con un ojo negro me sacaron", afirmó. Y agregó: "Fue una violencia simbólica y no tan simbólica".
En otro sentido, aseveró que la actitud de la Policía de la Ciudad instalada frente a su vivienda de la calle Juncal era "muy agresiva con los peronistas y familiares" y con los militantes de La Cámpora que llegaban a apoyarla y "muy permisiva con quienes venían a agredir e insultar".
Asimismo, la exfuncionaria agregó que "está comprobado" que la Policía de la Ciudad "hacía tareas de inteligencia" en los alrededores de su vivienda.
En uno de los puntos más fuertes de sus declaraciones cuestionó la investigación del intento de atentado en su contra. Dijo que "la instrucción de la doctora Capuchetti fue un desastre total y absoluto" y cuestionó que la Justicia "nunca intentó dar con los autores materiales" del hecho.
"Estamos solo frente a los autores materiales, siempre el hilo se corta por lo más delgado", añadió.
Al recordar el momento del atentado Cristina Fernández afirmó que antes "no tuvo miedo" de ser víctima de un atentado porque "nunca se me ocurrió que en la Argentina democrática podía haber" uno. En este sentido, señaló que fue "ingenua" y que no vio el cambio de época y el aumento de la violencia.
Por último, aseveró que tras el intento de asesinato del que fue víctima, toda su "familia fue afectada". Según enumeró, se mudó de su casa "a un barrio un poco más amigable que Recoleta", donde implementó una serie de "cuidados que hay que tener y que antes no tenía", como más "seguridad". También resaltó que sus hijos y su nieta resultaron afectados por lo ocurrido: "Mi nieta tenía miedo de salir de su cuarto y de que la mataran. Una familia que sufre esto tiene consecuencias"