Alejandro Gramajo, secretario general UTEP participó del encuentro en el Vaticano donde organizaciones sociales de todo el mundo se reunieron con el Papa Francisico.
El máximo representante de la iglesia católica recibió a diferentes dirigentes sociales mundiales al conmemorarse 10 años de la primera reunión de este tipo en la santa sede.
En contacto con “TER” por “Radio Provincia” Gramajo señaló que esta reunión si dio en una “situación muy triste y muy difícil para la Argentina” porque mientras se “reprimen a los viejos y a los niños, tenemos más de 1 millón y medio de niños y niñas que se va a dormir sin comer, más de 10 millones de compatriotas en situación de indigencia, y más de 25 millones en situación de pobreza“.
Seguido el dirigente social estimó que “las declaraciones o la intervención del Papa” tras el encuentro “tienen una alta repercusión porque, lamentablemente, todo lo que critica Francisco del capitalismo salvaje y deshumanizado, y cómo los gobiernos utilizan determinadas herramientas para encarar el conflicto social, en Argentina se dan completo”.
“Porque en el país hay pobreza y un gobierno que decide encarar el conflicto social a través de la represión, que es el peor camino” enfatizó el dirigente de la UTEP y destacó: “No sabemos que hablo con Sandra Pettovello pero si podemos contar lo que hablo con nosotros o con la CGT donde también participamos”.
“Él nos instó a no dejar de pelear por la dignidad que genera el trabajo y a no bajar los brazos en la pelea por justicia social” detalló Gramajo y agregó que “hay un tema que le preocupa mucho que es el avance del narcotráfico en las barriadas populares como consecuencia del deterioro de la comunidad organizada. Porque los clubes de barrio y organizaciones civiles cierran las puertas ya que no pueden sostener el funcionamiento y con el retiro del Estado del territorio avanza el crimen organizado. Y no sólo para venderle droga a los pibes del barrio sino también para reclutarlos como mano de obra”.
Finalmente, el secretario de la UTEP agregó que le “plantearon” al sumo pontífice “que el pueblo lo está esperando con mucha ansiedad” y Francisco les dijo que “tiene previsto venir, está en sus deseos viajar y está estudiando alternativas”.
Por lo tanto “espero que el gobierno de Javier Milei tenga la madurez suficiente para poder recibirlo como se merece y dejar de hacer declaraciones como las que han hecho algunos ministros porque hay que poner al Papa en una dimensión de carácter histórico, porque es la figura más importante del mundo y es argentino” analizó Gramajo y concluyó: “Así como el Papa lo perdonó a Milei y lo recibió a él y a sus funcionarios, el gobierno de Milei tiene que hacer todo lo posible para que, el Papa cuando venga, pueda visitar a su pueblo y trasmitirle el mensaje que considere”.