Estudiantes, docentes y no docentes de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQui) denunciaron que militantes vinculados a La Libertad Avanza ingresaron durante el desarrollo de una asamblea y rociaron gas pimienta sobre los presentes. El episodio provocó posteriores agresiones, cantos cruzados y la expulsión de los acusados del lugar.
En diálogo con el móvil de la Radio Pública, la docente y secretaría adjunta del sindicato de docentes, Ayelén Díaz, brindó detalles sobre el incidente. Afirmó que se desarrollaba una asamblea cuando un grupo de 15 personas relacionadas con LLA, que en su mayoría no eran estudiantes, ingresaron al establecimiento con la intención de “romper la asamblea” y que no se interrumpan las clases, pese a que se desarrollaban en el marco del plan de lucha.
Seguido, indicó que el grupo comenzó a “escalar en la violencia”, con un estilo de “fuerza de choque”, y en un momento sacó gas pimienta de los que utilizan las fuerzas de seguridad y comenzó a arrojarlo sobre las personas en un espacio cerrado y las afectó de tal forma que tuvo que intervenir el SAME.
Díaz aseveró que la preocupación gira en torno a “cómo se va espiralado la violencia en las últimas semanas luego de la victoria popular” de las marchas universitarias donde “el Gobierno tuvo una derrota política porque la sociedad les dijo que la universidad pública no es variable de ajuste y de aplicación de la crueldad que ellos preparan para nuestro pueblo”.
Al ser consultada sobre el impacto de las declaraciones del presidente Javier Milei, y del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, sobre que las universidades adoctrinan “subversivos”, señaló que “lo de ayer no fue un caso aislado (...) tenemos intercambios frecuentes con el secretario de Políticas Universitarias, Álvarez, quien se muestra con un tono violento y hostil con las representaciones sindicales". En ese marco, advirtió que "vemos que se va profundizando un esquema de violencia y de construcción de sentido de deshumanización hacia quienes realizamos prácticas políticas democráticas como puede ser la construcción de una asamblea o una toma pacífica en una universidad y van construyendo la estigmatización de quienes lo hacemos”.
Seguido, planteó que esto genera preocupación porque eso “es lo que antecede a los momentos más oscuros de la democracia y los vectores más violentos en los que han cometido crímenes de Lesa Humanidad”.
Por otra parte, se refirió a los dichos del vocero presidencial, Manuel Adorni, sobre la petición de intervención de fuerzas federales para evitar la participación activa en torno a la defensa de la educación pública universitaria “nos alerta y nos preocupa”, enfatizó.
Por último, Díaz sostuvo que las acciones del Frente Sindical Universitario “están acompañadas por los estudiantes y en dos semanas realizarán una nueva marcha federal universitaria”, en defensa de la educación y concluyó que “esto se va a resolver en las calles”.