Explicó que el FUSA impulsa desde el año 2012 una investigación en el que "venimos desarrollando acciones de incidencia tanto a nivel internacional, nacional y regional". Dicha investigación, observa "cómo operan estos grupos tanto en Naciones Unidas como en distintas instancias".
Al respecto dijo que los grupos antiderechos, tiene un funcionamiento especial en el que "tanto dentro en las deliberaciones de las delegaciones oficiales de la ONU, como por fuera de la sociedad civil" buscan el convencimiento y la creación de discursos.
La socióloga, resaltó que "en el 2018 cuando se comienza a debatir la Ley de Aborto en Argentina, los vimos operar".
En ese sentido, el informe es la conclusión de un análisis que según María Alicia Gutierrez, “permite visualizar el accionar de estos grupos”. Además, posibilitó hacer un "mapeo de actores que habían mostrado su posición en las audiencias públicas de la cámara de diputados en el 2008 y detectar sus argumentos".
Desde lo discursivo, enfatizó que "las herramientas que utilizan" tiene como "objetivo una redefinición los Derechos Humanos" y "una de las estrategias más importantes es apelar a una serie de cuestiones, como la soberanía nacional, la cultura propia de cada lugar, las tradiciones, las religiones",
Su base argumentativa, según explicó la socióloga es construir "un nuevo orden social a través de la centralidad en la familia, monogamia, heterosexualidad, cuyo lugar central son las familia y el lugar de las mujeres".