Leandro Pontaroli es ingeniero agronómico y responsable de la chacra experimental Miramar, que depende del ministerio de Desarrollo Agrario.
En diálogo con “Arriba Provincia” por Radio Provincia, se refirió a los desafíos de desarrollar una producción sustentable basada en la agroecología.
Al respecto mencionó que el principal objetivo “es tratar de bajar el impacto ambiental a través de tecnología de manejo y no simplemente con el uso de insumos”.
Desde la chacra experimental Miramar, destacó que “los ensayos realizados” se hacen bajo “una secuencia de cultivos” a través de “un desafío” particular de manejo productivo.
El especialista puntualizó que existen tres modos: el “convencional”; “el basado en lo ecológico con cero insumos, que podría instalarse en una zona periurbana” y otro que es un mis, que consiste en el que el uso de agrotóxicos es una forma que se adopta “si no queda otra opción”.
Pontareli, enfatizó que “el desafío es disminuir el impacto ambiental. El año pasado cosechamos trigo y este año, maíz”.
En ese sentido, “una de las cosas que vamos a mirar”, transcurridos “cinco años”, es “la parte económica a nivel de los productores, la generación de divisas, por volumen de producción total, la huella ecológica de cada forma de trabajar, en la estructura del suelo, las propiedades químicas, el impacto del calentamiento global y, obviamente, todo dentro del ámbito de lo nutritivo”.
Para finalizar, detalló que el trabajo “es muy ambicioso, pero no estoy sólo”, por cuanto hay instituciones involucradas en el proyecto, como “INTA, la facultad de ciencias Agrarias de Balcarce y la Azul y el trabajo de Conicet”.
Insistió en que “más allá de lo técnico, hay muchas instituciones públicas y privadas que están detectando la necesidad de dar pasos hacia la sustentabilidad, con el fin de contribuir al desarrollo sustentable del sector agropecuario, agroalimentario y agroindustrial.