En diálogo con El Repaso explicó que el cónclave que elegirá al sucesor de Francisco está integrado por 133 cardenales varones de altas jerarquías en sus diócesis, 4 de ellos argentinos. “Este cónclave tiene la característica que es el más interpersonal de la historia”, dijo, y destacó que desde el papado de Jorge Bergoglio se incorporaron numerosos países a ese ámbito. “La apertura se dió con Francisco, antes era una cuestión que dirimía entre italianos”, señaló.
Seguido, sostuvo que la expectativa generalizada en torno a la decisión, se debe a que “el líder del Vaticano es una voz en el ámbito geopolítico autorizada a hablar a favor de la paz, en contra de las guerras. La elección del Papa genera interés, siempre es una apuesta política. En este caso también, cómo se va a resolver es una pregunta, porque hay una tendencia a la apertura que responde a la inquietud de los católicos que quisieran una liturgia más fiel a la conservación del lazo social y familiar”.