Al comienzo de la entrevista, Luciano Castro se refirió al título del unipersonal que protagoniza, Caer y Levantarse, y señaló: “En la vida de todos hay un caer y levantarse. Me acuerdo cuando estábamos escribiendo y yo tenía el título pero no tenía la obra. Mey (Scápola) me decía 'para, vamos a ver si lo encontramos cuando tengamos el texto entero' y yo decía que no, que el título era ese. Entonces tuve que elegir una profesión y dije boxeador, porque es un mundo que conozco. Los boxeadores son las personas más nobles que conocí en mi vida, tipos que se matan a piñas y después se abrazan. Lo que nadie sabe que, al menos acá en Argentina, los boxeadores se cambian juntos y después de la pelea se bañan juntos. Son muy nobles y vienen de lugares marginales la mayoría”.
Por otra parte, al respecto del personaje que realiza, el actor precisó: “Junior tiene mucho eso de la injusticia de la vida; Junior es padre, fue novio, es hijo, es hermano. Hay un montón de cosas que tiene que son comunes de la gente. Yo quería que cuando él contase cualquier tipo de miseria, que no aleje a la gente, que al contrario la gente diga 'te doy una mano' que es lo que debería pasar socialmente”. A lo que añadió: “Acá el adicto está mal visto, bueno a veces hasta está mal visto ser gay. Somos una sociedad muy careta, avanzamos un montón de la lengua para afuera pero puertas adentro seguimos siendo discriminadores. Lo que debería existir es la aceptación real de todo aquello”.
Además durante la charla en el programa Dos Dinosaurios Vivos detalló: “Es la primera vez que hago un unipersonal. Nunca rompí la cuarta pared trabajado y acá vos fíjate que tampoco la cuento. Yo no espero respuesta del público, yo solo le cuento al público. Como actor, un recurso que tengo cuando estoy inseguro es que voy a lo que me queda cómodo y me es seguro, que muchas veces es lo que no hay que hacer. A mí Mey no me permitió nada de todo eso, ni un gesto. Cuando me quise dar cuenta ya estaba haciendo a Junior y no se ni como lo hago, solo me sale”.