En declaraciones a Radio Provincia AM1270 el mandatario bonaerense calificó al hecho como “una provocación más” por parte de “un Gobierno negacionista en materia de derechos humanos, de desaparición de personas, que tiene todo ese discurso que la sociedad argentina, por haberlo sufrido en carne propia, lo repudió”.
El Gobernador relató que, según contó el intendente Fernando Espinoza, los vecinos lo vieron llegar escoltado por siete camionetas blindadas, como si fuera el presidente de Estados Unidos. “Fueron, se sacaron la foto y se rajaron”, indicó.
Seguido, manifestó que “es muy triste que la única visita que hizo a La Matanza y prácticamente la única que hizo a la provincia de Buenos Aires fue una visita relámpago para sacarse una foto provocando”.
Kicillof sostuvo que “hoy la situación es suficientemente grave como para que el Presidente, en lugar de negar y mentir, tome conciencia” y, en lugar de “hacerse el distraído o insultar, se dedique a gobernar la Argentina y eso es dar trabajo, contener, acompañar a la salud, a la educación, impedir que se cierre la industria nacional y la universidad, todo lo contrario a lo que está haciendo”.
“Me parece que de alguna manera, con ese pequeño acto furtivo, está demostrando lo poco que le interesa la Provincia y su pueblo”, subrayó.