En diálogo con el programa Narraciones Extraordinarias, la escritora expresó: “El título medio como que vino al final, después del armado del libro. Se llamaba de otra forma antes ahí en un intento de agruparlas y no me convencía, hasta que encontré esta palabra usada ahí como en un contexto no parecido al del cuento pero si en el contraste, con un trasfondo más oscuro que el uso de la palabra. Entonces dije 'puede ir por acá', más por el lado moral si se quiere de la palabra que alude más a la intención de las narradoras, porque son todas mujeres aunque aparece algún que otro hombre perdido por ahí”.
“Tiene que ver más con eso, con el sentido moral. Más en su intención de que hacen lo que hacen siempre alguien que se está muriendo. Buscan de alguna forma rescatar un costado bienintencionado de la muerte, completamente cuestionable, pero avanzan con eso, con una escritura muy íntima de lo que significa para cada una de ellas lo que está ocurriendo. En ese punto, me sirvió esta palabra del título”, continuó Rocío Lago, autora de Las cándidas.
Por otra parte, indicó: “En la variedad de los formatos cada una busca el formato que le queda cómodo para poder hablar, son textos más del registro de la oralidad o de algo de lo que está pasando, como en el que una piba que está cuidando a una señora que se está muriendo en la bañadera. Me parece que ese era el formato, a través del movimiento, de la música”. Mientras que concluyó: “Está lleno de formatos distintos, más clásicos o menos, pero inspirados de alguna lectura, robados de por ahí”.