En comunicación con “Pase lo que Pase”, por Radio Provincia, el legislador afirmó que “fue una enorme responsabilidad histórica. Como militante me ha tocado estar muchas veces en esa plaza y como militante, siento esa responsabilidad en el cuerpo”.
Agregó que “lo de ayer fue muy importante porque logramos consolidar una mayoría más o menos estables, algo que hace unos meses costaba mucho más, que permite ponerle un freno a las políticas de Milei”.
“Cada vez que tuvimos un triunfo legislativo en el recinto -continuó- es porque estaba pasando algo afuera. Nunca fue un triunfo en soledad, producto de la rosca política”.
El diputado Toniolli expresó a continuación que “esto parece haberse consolidado y tiene que ver con que una parte importante de la dirigencia política que hasta ahora fue condescendiente con el gobierno, empezó a oler otra cosa en el aire, un cambio de humor social”.
“Hay un congreso que está más permeable a escuchar lo que pasa afuera -insistió. Los gobernadores tomaron conciencia de que Milei los quiere de socios del ajuste, por lo que debían decidir si prenderse fuego con el presidente de la nación o tomar una mínima distancia”.
Consultado sobre los dichos del ministro Luis Caputo que lo acusó a él y a los radicales de golpistas, el diputado Toniolli afirmó que “ninguno de nosotros sabe cómo va a terminar este experimento. Sabemos que va a terminar, pero no cual es la forma en que se va a producir ese desbarranque. Pero todos sabemos que Toto Caputo va a intentar escapar de la Argentina, se va a ir a hacer un postgrado a Estados unidos, porque Caputo es de los pocos argentinos que les va bien cuando a la mayoría de los argentinos le va mal. Espero que esta vez no se escape y pague por los desaguisados que lleva a adelante”.
Por último, afirmó: “Tengo la certeza que este proyecto está terminado, no el gobierno porque todavía tienen dos años más, pero el proyecto no tiene nada para ofrecerle a los argentinos que trabajan, que estudian, que producen. Es un gobierno del capital financiero internacional y de las corporaciones transnacionales interesadas en explotar nuestros recursos estratégicos y un gobierno de esas características no puede estabilizarse ni social ni políticamente, ni mucho menos trascender en el tiempo o lograr la reelección. Tarde o temprano estos experimentos terminan mal y hay que pensar cómo salimos de esto”.