En diálogo con Hay un lugar por Radio Provincia AM1270 dijo que el panorama “es bastante complejo” ya que “desde que arrancó el gobierno de Milei hay casi 5000 empleadores menos en la Provincia y se perdieron 9500 puestos de trabajo, que no es solo una persona sino toda una familia que se ve afectada”. Y esto sucede “en un contexto donde además suben los servicios, los precios, caen las ventas en los supermercados, las familias compran cada vez menos comida y están más endeudadas”.
Seguido, advirtió que “estamos viendo que cada vez hay más despidos” y explicó que “durante 2024 vimos una pérdida de empleos que definimos ‘por goteo’: una persona que renuncia y no es reemplazada, algún despido o arreglo en alguna fábrica que ajustaba quizás sus dotaciones de personal, planteaba suspensiones o adelanto de vacaciones. Pero eso ya no está ocurriendo, lo que está pasando es que ya no hay más vacaciones para adelantar ni más turnos para suspender”. En ese marco, “lo que vemos es directamente el cierre de líneas completas de producción y el cierre de empresas” nacionales y extranjeras. "En 2026 esta situación se va a agudizar, y probablemente en muchas ocasiones no haya posibilidad de pagar indemnizaciones tampoco”, recalcó.
La funcionaria mencionó que desde el ministerio de la Producción junto al ministerio de Trabajo bonaerense sostienen reuniones semanales con empresas “para ver si con alguna de las herramientas que tiene la Provincia podemos lograr sostenerlas y que no cierren”. De todos modos, “son paliativos” teniendo en cuenta “la política del gobierno nacional que abre las importaciones” y que expresa en su discurso que “la mejor política industrial es la que no existe”.
En ese escenario, “el Estado se corre y lo único que hace es facilitar la importación o la apertura indiscriminada que genera que además los productos nacionales compitan con productos que no está claro en qué condiciones se produjeron, y que en algunos casos podrían poner en riesgo la salud de la población”, concluyó.