El primer deporte que practicó fue el básquet, desde los 8 años. A los 16 se trasladó a Córdoba donde jugó para Atenas. En el primer año de Universidad practicaba en paralelo el básquet y el fútbol. Pero llegó un momento que fue demasiado y tuvo que elegir. “En mi bolso había ropa de básquet y botines de fútbol, salía de una práctica e iba a la otra. Estaba muy cansada y todos se sorprendieron cuando anuncié que dejaba el básquet. Todavía tengo más años como basquetbolista que como futbolista”.
Valentina comenzó su recorrido como futbolista en Racing de Córdoba, luego por Belgrano y ya en Buenos Aires jugó para la UAI Urquiza. Integró la Selección Argentina que clasificó al Mundial de Francia, del cual no participó por lesión.
Decidió irse del fútbol argentino, “cruzar el charco” y recaló en España firmando con el Alavés (2019-2020) de la Segunda División y luego pasó al Femarguín.
Con el equipo Canario logró la permanencia en esta temporada, “no hicimos buena campaña al principio, fue duro y cuesta arriba, recién en el último partido pudimos lograr la permanencia”.
En cuanto a cómo ve el desarrollo del fútbol femenino en nuestro país opina que ha progresado pero que es difícil que iguale al europeo porque allá no para de crecer. “En Argentina las jugadoras de Primera División tienen que trabajar además de jugar al fútbol, acá son muy pocas las que lo hacen, se puede vivir del fútbol”.
En España, hace apenas unos días, se aprobó la profesionalización del Fútbol Femenino, pero de hecho sin ninguna obligación, los Clubes firmaban contratos con las jugadoras.
Según Cámara uno de los problemas que tiene el fútbol femenino en Argentina es que la AFA baja línea que se rompe cuando llega a los clubes. “Los Clubes de puertas para afuera se llenan hablando de Fútbol Femenino pero puertas adentro te das cuenta que no y sigue habiendo situaciones de precariedad en los contratos”. A lo que agregó que hay Clubes del interior que le dan prioridad y sin embargo hay muchas trabas y que es conveniente agilizar esta situación.
“Gambeta de Dama” sorprendió a Valentina con testimonios de seres queridos. En primer lugar con una amiga y compañera de Selección, la delantera Milagros “Mili” Menéndez, quien dijo “estar orgullosa” de la evolución futbolística de Valentina.
Luego fue el turno de su padre Fabián, que la felicitó pero a su vez le reclamó el regalo por su día “me tenés que comprar esas cosas para mi deporte”. “Ese deporte” es el golf. También hubo palabras de su mamá y por supuesto toda la familia estaba escuchando el programa desde Viedma.
Por último consultada acerca de la migración de jugadoras de éste continente hacia Europa, Valentina aseguró “que las definen como deportistas con mucha sangre, mucha entrega y cálidas en el trato, eso es muy valorado” cosas que no tienen las europeas y tampoco las norteamericanas.