El periodista especializado en rock argentino, Sergio Marchi, contó anécdotas de sus encuentros con Charly García en momentos que estaba escribiendo un libro sobre la vida del músico.
La biografía sobre Charly García, de su autoría, titulada “No digas nada”, fue publicada en 1997 y reeditada en 2007 con nuevos capítulos que actualizan la edición original. El libro se transformó en un éxito de ventas y contribuyó a difundir a su autor, que inició de esa manera una etapa de escritor que tuvo sus puntos altos en otras exitosas biografías como la de Pappo (2011) y Luis Alberto Spinetta (2019).
Por “El Frasco”, destacó que “comencé mi carrera profesional en 1983 con la revista Tren de carga, fue el puntapié. Antes hubo recitales, alguna credencial falsificada de periodista, algunas bandas. No sé cuándo comenzó todo ni cuándo termina”.
Al relatar las circunstancias en las que empezó a frecuentar a Charly García, dijo que “la chica con la que me puse de novio en aquel entonces vivía a una cuadra y media de la casa de Charly (…) eso me permitía estar cerca, alguien me decía corporizate y yo, cual genio de Aladino, me aparecía en su casa”.
“Una vez Charly me dijo: me gustabas más cuando no hablabas, no lo puse en el libro. Cuando iba a su casa tenía que estar preparado para cualquier cosa, como el día en que me dijo que tenía que ser su manager (…) y que si no me hacía cargo había un naufragio inminente”, significó el periodista.
Después de que el libro fue publicado, “nos fuimos viendo cada vez menos. Después me convocaron al equipo cuando lo internaron, se trató de hacer una liga de super amigos para internarlo y luego hubo un par de cosas que no me gustaron y dije chau”.
Sobre el libro que refiere a Spinetta, admitió: “cuando murió pensé que no se iba a poder, luego hice un puente con los hijos, porque ellos son como un clan”. “Por suerte quisieron y pudimos hacerlo, conté con la colaboración de todos ellos y hasta aparecieron, muy locamente, los papás, de un reportaje que yo había hecho en 1997”.