La narradora, poeta y dramaturga cubana, Elaine Vilar Madruga, promocionó por Radio Provincia su última novela “La Tiranía de las Moscas” que retrata de “la historia de niños” y que se construyó en “base a un juego” en el que “se habla de la libertad, de la represión, de las estructuras familiares y estatales caducas, del poder de la infancia y del poder de la adultez”.
La autora señaló en Narraciones Extraordinarias que “intenté contar esto de la forma más lúdica posible, no acribillando a los lectores con mis ideas, sino acribillarlos con provocaciones” porque, entiende, “la provocación en la escritura es muy útil porque ayuda a los lectores a acercarse a lo que uno quiere trasmitir”.
Vilar Madruga sostuvo que su novela “es un juego para zumbar junto a las moscas, sentirnos un poquito una de ellas, volar por encima de los secretos de la familia y de un Estado, porque las cosas no dichas nos pudren por dentro y hay que soltarlas para poder florecer y vivir”.
La escritora cubana se reconoció como parte de “una familia de excelentes lectores y personas que aman la historia”. Sostuvo que creció “rodeada por el mar y por los libros, y mi casa es un lugar donde encontrás libros de 3 generaciones de personas”.
Asimismo, manifestó que siempre estuvo ligada al arte. “Primero estudié música y soy graduada de guitarra clásica”, recordó, pero luego entendió que “la magia que permite atraer a las personas con los sonidos también se puede hacer con la palabra escrita. Fue una trasmutación muy natural”.
En ese marco, señaló que “escribir es limitar” y subrayó que “es bueno cruzar los límites poniendo poesía donde hay narrativa, teatro donde hay poesía, y luego narrativa donde hay poesía. Y esos cruzamientos son juegos con el lenguaje y con uno mismo”.