Patricia Ratto se refirió a su novela Trasfondo, que narra la participación del submarino ARA San Luis en la Guerra de Malvinas, y que será llevada al cine por Pablo Giorgelli, y que actualmente se encuentra en proceso de filmación. La escritora y docente manifestó que escribir esa historia “fue un proceso extraño” porque se encontró con el episodio cuando un submarinista contó su experiencia en el enfrentamiento bélico en la escuela donde ella trabaja. Explicó que “me pareció que todo lo absurdo de la Guerra de Malvinas se reflejaba en la historia de ese soldado que en aquel entonces tenía 19 años”.
En declaraciones a Radio Provincia, manifestó que “el ARA San Luis era un submarino que tiraba torpedos que no funcionaban y tenía que esconderse de la armada británica que estaba con todas sus armas y despliegue a disposición. Era un submarino alemán que fue armado en un astillero en la Argentina pero que a los pocos años estaba deteriorado y le funcionaba la mitad de las cosas”.
Ratto dijo que en aquella charla que estaba dando el submarinista ante alumnos se encontró con “todo lo que había leído sobre Malvinas, estaba ahí siendo parte de la realidad” y por eso “me obsesioné con esa historia”.
La docente sostuvo que empezó a escribir la obra después de una larga investigación que le demandó tres años de trabajo, en los cuales entrevistó a parte de los 35 submarinistas que fueron parte de la misión del ARA San Luis. “La novela está basada en la historia real. Lo que cuento es lo que ocurrió aunque tiene algunos recursos de la ficción porque no puedo escribir algo realista sin ir al borde lo fantástico”, detalló.
Además de Trasfondo, Ratto publicó libros como “Pequeños hombres blancos”, “Nudos” y “Faunas”. En diálogo con Narraciones Extraordinarias reveló que “en Estados Unidos siguen esperando que los latinoamericanos escribamos esas 'cositas raras' que escribimos. Es una literatura inclasificable. Una escritura realista pero que navega por el borde de lo fantástico. Ellos quedaron anclados ahí y nos demandan que escribamos sobre realismo mágico”, aseguró.
Sin embargo, aclaró que al momento de escribir “no pienso en el lector ni si se va a publicar. Escribo lo que necesito escribir y después si se publica bien. No voy detrás de las demandas del mercado. A veces son temas sobre los que no se están hablando. Tengo una cuestión con la animalidad que está en toda mi obra”.
Respecto de su acercamiento a la lectura y la escritura, mencionó que “tuve una abuela maravillosa que me contaba historias mientras tejía medias con cuatro agujas. La palabra texto viene de ahí. De tramar hilos para contar historias”, subrayó.