El curador de la muestra organizada y exhibida en la Biblioteca Nacional, "Hijxs. Poéticas de la memoria", Federico Boido, dijo que la presentación “tiene la aspiración de exponer buena parte de las novelas, poemarios, fotografías y películas producidos por la generación de los Hijxs” de las y los desaparecidos de la última dictadura cívico militar. La misma estará abierta al público de forma gratuita de lunes a viernes entre las 10 y las 16 hasta el próximo mes de marzo.
Por Radio Provincia, sostuvo que “a mediados de los noventa surgió la agrupación Hijxs y alrededor suyo toda una serie de prácticas ligadas al escrache” a los represores que continuaban en la impunidad. Estas intervenciones públicas dieron paso a “toda una serie de producciones artísticas de estos hijxs que en muchos casos estaban agrupados en la organización, en otros lo estuvieron y ya no lo están, y en otros casos nunca lo estuvieron”.
Boido recordó que la muestra nació desde el equipo de investigación de la biblioteca, que se puso a pensar en una exposición de escritores jóvenes. No obstante, señaló que “empezamos a encontrar estas relaciones entre las producciones de los Hijxs” y, en ese marco, detalló que la idea original giró y ahora “queremos pensar qué es lo que trae esta generación”. Adelantó que “fuimos detectando una identidad colectiva, como una trama de comunidad, que siguió multiplicándose en forma de producciones artísticas”. Según el curador de la muestra, la obra de esta generación de hijos de luchadores sociales “es muy diversa y muy profusa”.
Precisó que quienes recorran la exhibición podrán encontrar parte de lo que fueron los carteles de la memoria del grupo de Arte Callejero en la plaza de la biblioteca. En tanto, adentro del edificio, una de las salas expone piezas audiovisuales y fotográficas de grupos que acompañaron los escraches. También producciones que hicieron estos hijxs con la única foto que le quedó de su familiar, con parte de un pulover, con un poema. Por último, hay otra sala que aborda el tema de las infancias.
En ese contexto, Boido reconoció que una de las misiones de la Biblioteca Nacional “es preservar la memoria escrita del país”. Sin embargo, agregó que además “tiene que poner en funcionamientos esas memorias, no como conservación para cerrarlas, sino para abrir su propia historia a esta generación y poner en diálogo las narrativas que allí habitan”.
Para cerrar, resaltó la tarea de reparación que está realizando la institución alrededor de esta muestra, y recordó que durante su presentación, el cineasta e Hijo, Andrés Habegger, planteó que “el hecho de que la Biblioteca Nacional, que es una entidad bicentenaria, reconozca la voz de esos hijos y la legitime era muy conmovedor, pensando además en que fue parte del Estado que desapareció a sus padres”.