El ex presidente del INTI Enrique Martínez contó su experiencia al frente del Instituto para la Producción Popular desde el cual intentan eliminar intermediarios entre los productores de la agricultura familiar y los consumidores. “Buscamos encontrar fórmulas para vincular a los pequeños productores que no tienen acceso a los hipermercados, en parte porque no les interesa ya que ese sistema de comercialización se lleva gran parte de su valor agregado y en parte porque hay un bloqueo logístico, financiero y de toda naturaleza” para que no ingresen a esos centros comerciales, definió.
En declaraciones a Radio Provincia, indicó que esos trabajadores “tienen un horizonte inicial de distribución local y nosotros hemos avanzado en imaginar formas de conectar a los productores pequeños de la agricultura familiar con consumidores de todo el país a través de los mecanismos más modernos, como la disposición de un portal de comercio electrónico (www.produccionpopular.org.ar) que permite concentrar los pedidos y despacharlos desde un mismo lugar. Eso nos ha permitido reunir a gente que produce harinas integrales en Catamarca, gente que produce mermeladas de las frutas finas de Chubut, y así una gama con 300 productos en ofertas, con entre 45 y 50 proveedores”.
Martínez afirmó en Historia Nocturna que en esta iniciativa el productor se lleva el 80 por ciento del valor final que paga el consumidor, cuando mediante los mecanismos habituales de venta reciben entre un 40 y 50 por ciento en los productos industrializados y el 15 por ciento en frutas y verduras. En tal aspecto, aclaró que “el consumidor va a pagar lo mismo por los dos canales, pero en este caso el productor recibe mucho más”.
Por otra parte, el titular del Instituto para la Producción Popular sostuvo que esta propuesta “no se puede hacer sin coordinación de un ente que asuma centralmente la planificación del conjunto, que en este caso es una modestísima asociación civil”. En ese sentido, resaltó que “si el Estado nos reemplazara y complementara nuestros esfuerzos se podría hacer con muchos más proveedores y desplegar ventas en mercados de proximidad”.
Martínez opinó que “la democracia delegativa viene haciendo tremendos daños a la sociedad” debido a que “la participación ha pasado a ser una palabra etérea”. Agregó que “como los sectores que son elegidos conocen esto, es más tensa la puja por el poder sabiendo que se consigue desplazando al adversario en el momento de la elección de los candidatos, y no en el territorio programando saberes y soluciones para los problemas de la gente”.
El militante consideró que “en este momento somos mucho más escuchados que hace seis meses, lo cual no quiere decir que vayamos a tener soluciones importantes. La dirigencia política está pasando por uno de los peores momentos en muchas décadas en cuanto a capacidad para vincularse con los problemas reales de la gente”.