Mañana cierra la convocatoria para aquellos ciudadanos que quieran participar de la cuarta audiencia pública regional que realiza la Defensoría del Público. En esta oportunidad, podrán registrarse para participar los ciudadanos de la provincia y de la ciudad de Buenos Aires.
La convocatoria es mixta. Se podrá asistir el Lunes 6 de diciembre de manera presencial a la Universidad Nacional de Quilmes o se podrá realizar la presentación de manera virtual el martes 7. Los expositores pueden registrarse desde la página de la Defensoría del Público y contarán con un tiempo de entre 5 y 7 minutos para expresarse.
En Siete Colores, por FM 97 UNE Miriam Lewin, defensora del Público explicó: “La Defensoría del Público es un organismo que se creó a partir de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual para defender a las audiencias”.
Y aclaró: “Este es un organismo autónomo que no tiene potestad sancionatoria, pero recibe reclamos y consultas de las audiencias de Radio y TV y se encarga de evaluar aquello que pasa en los medios de comunicación”.
Lewin destacó que “pese a que es una instancia democrática y participativa, durante el gobierno del Macrismo no se hicieron”. Y agregó que “cuando el nuevo gobierno asumió tenía la ilusión de reanudar los encuentros, pero no fue posible por la pandemia.”
Sin embargo, resaltó que en 2021, “las primeras 3 audiencias regionales fueron virtuales. Y en diciembre se realizará la primera que va a tener una jornada mixta presencial y virtual”
Lewin señaló que el contexto sanitario mundial propone un situación excepcional, para todos, porque los saberes se van actualizando y señaló que a pesar de ello “hubo muchos reclamos de las audiencias, en principio sobre los dichos de una presentadora que bebía dióxido de cloro en cámara”.
“Ella es una referente porque hace más de 20 años que trabaja en tele, pero promovía una actividad que el ANMAT decía que dañaba tejidos. Es decir que no sólo no protegía sino que era peligroso. Después convocó a un especialista que dijo, tras de la muerte de Mauro Viale, que no había que vacunarse porque la vacuna mataba. Y, después dijo que había unos hisopos que predeterminaban el positivo para que el gobierno nos encierre. Todos argumentos de una organización internacional que en Argentina tienen vínculo con el nacismo: Médicos por la Verdad” describió.
Lewin recordó que "En el caso del dióxido de cloro, habíamos convenido con la producción del programa la difusión de un spot realizado por la Defensoría en sociedad con la Red Argentina de Periodismo Científico, que son profesionales preparados para comunicar sobre ciencia y salud , pero unilateralmente, el canal lo emitió en un horario marginal".
Y por ello: "Nosotros consideramos que la mediación había llegado a un punto muerto. Dimos por cerrado el caso y remitimos las actuaciones al ENACOM, cosa que hacemos siempre que no se llega a un acuerdo. Y por su puesto hubo una sanción" agregó.
En ese marco, la titular de la Defensoría señaló que el organismo " en primera instancia dialoga, brinda capacitaciones e intenta acercar posiciones, pero si se encuentra en un punto muerto el ENACOM, sanciona. No es gratis decir cualquier cosa por los medios. Hay una instancia sancionatoria, que puede ir desde una llamado de atención, una multa y puede llegar hasta el retiro de la licencia del canal o la radio".
Además, Lewin explicó: "Es muy importante en un Estado democrático la libertad de expresión. Pero, este no es un derecho absoluto. No se pueden promover conductas que son lesivas para el salud y la vida o que vulneren una ley".
Finalmente, calificó de “preocupante” los discursos de odio que llegarán al Congreso de la Nación porque sus autores han ganado sus bancas en las urnas.
“Esto es preocupante porque estos discursos violentos, que se pueden propagar desde los medios o de las redes, tienen efectos en la vida real y atentan contra la vida pública y el sistema democrático” aseguró y aclaró que estas expresiones son “una preocupación en Argentina y en el mundo”.
Lewin apuntó: “Hay que estar atentos. Pues, aquí también se habla de la libertad de expresión” y reflexionó:”Cuando empezaron a surgir las redes sociales, había una gran expectativa ya que se hablaba de la democratización de la comunicación. Pues, a partir de ellas mi vecina podía hacer llegar su posición al mundo. Era una plaza pública. Sin embargo, esto demostró tener un costado oscuro”.
“Las redes no deben ser un espacio para excluir o estigmatizar al que piensa distinto, o tiene diferente apariencia, orientación sexual, o capacidad de ser madre. En las redes se puede discutir acaloradamente, pero con argumentos. No tenemos que admitir que se use para estigmatizar o silenciar con los que no estamos de acuerdo” concluyó.