La comunicadora y gestora cultural Rocio Bergé habló del libro “Cultura independiente La Plata. Emergencias y divergencias en la Ciudad Imaginada”, del cual es compiladora junto a Martín Zúccaro. La obra reúne la opinión de más de una decena de especialistas y expresa la idea de que, pese a la crisis económica y a la pandemia, los espacios culturales alternativos han reforzado su carácter aglutinante. “La idea de hacer este libro surgió en 2019 a propuesta de Ediciones RGC y es parte de una colección que se llama Tramas Urbanas”, manifestó, y detalló que se puede conseguir a través de Mercadolibre, la página de la editorial y en la librería Rayuelas.
En declaraciones a Radio Provincia, indicó que “teníamos el temor de que no sea representativo de la cultura alternativa local, por lo que decidimos sacar la foto de lo que ocurre en el presente”. Bergé aseguró que “quienes trabajamos en el sector nos conocemos y tenemos el registro del pasado inmediato, pero este material sirve para conocer la dinámica de este sector cultural independiente ya que están las conversaciones que tenemos en este tiempo”.En ese sentido, agregó que “me dejó muy satisfecha el hecho de entender un poco más cómo funcionan las escenas de la cultura independiente, porque son una huella de identidad” y resaltó que a pesar de que “tenemos un montón de palos en la rueda, también hay un momento de cosas ganadas”. La gestora cultural apuntó que “ya no está en la mesa la discusión de si esto es un trabajo o no”, al tiempo que destacó la importancia de la profesionalización de la actividad.
Asimismo, la comunicadora planteó que “la pandemia puso en evidencia la capacidad asociativa, ya que surgieron nuevas redes, más especializadas, y el libro muestra esta trama que siento sólida y sirvió para empoderarnos”. Además, sostuvo que “me disparó la idea de la necesidad de contar con un conversatorio cultural permanente para reunir investigaciones, trabajos, reflexiones y conocimiento del sector para que circulen los proyectos culturales”. Bergé admitió que en la actualidad “el mundo de la academia y el de la gestión están separados”, por lo que convocó a enfocarse en una “retroalimentación” por cuanto “la generación de datos es recontra importante para pensar los proyectos culturales”.