Los trabajadores y trabajadoras de la economía popular, de la cultura y sexuales afectados por el Código de Convivencia Urbana impulsado por la gestión del intendente de La Plata, Julio Garro, resolvieron llevar adelante acciones para plantear su derogación. Diferentes espacios de la sociedad civil consideran que la ordenanza institucionaliza “prácticas violentas y persecutorias” contra esos sectores. Las medidas se resolvieron luego de un encuentro desarrollado en la sede de la Comisión Provincial de la Memoria (CPM), que ya entregó un informe cuestionando el marco regulatorio.
Uno de los participantes de ese cónclave fue Ángel Ibáñez, integrante del Movimiento Nacional Surge, quien definió este Código como “represivo y punitivista” y afirmó que “va en contra de los intereses de la sociedad en su conjunto”. Además, apuntó que “es elitista y completamente inconstitucional porque atenta contra el derecho fundamental a la protesta”, así como “también contra el trabajo”. Por Sudaka en Radio, en Radio Provincia, sostuvo que esto se piensa ejecutar “en una ciudad donde más del 40 por ciento de las personas con edad activa están por fuera del sistema de producción y zafan” y se trata del tercer distrito del país con mayor índice de desocupación. “En este marco, el macrismo plántense (con el respaldo del GEN) construye un Código de Inconvivencia atacando a los sectores más vulnerables”.
Por otro lado, Ibáñez manifestó que durante el encuentro “la CPM planteó cuál va a ser el marco legal de cómo vamos a seguir avanzando para que no se pueda aplicar” debido a que “este Código genera antecedentes muy complejos para una sociedad que quiere construir de otra manera”. En ese marco, puntualizó que “vamos a hacer ferias, actividades culturales y movilizaciones frente al municipio para informar a los vecinas y vecinos sobre lo que se pone en riesgo”.