Publicada por la editorial Muerde Muertos, la novela "Útero de Cemento" de María Sola contiene relatos donde conviven escenas de fantasía y de terror.
En diálogo con Narraciones Extraordinarias la autora contó que "el título sale a partir de un dibujo que había hecho con ese título hecho en lápiz" y que "las historias, como las casas, con cosas que suceden en interiores. Situaciones de vida que suceden adentro de hábitats particulares".
Sola se dedica a la refacción de casas antiguas, y en ese sentido, graficó que "cuando tiro las casas, con las paredes y los revoques me da la sensación de estar dentro un útero y ver las venas, todo el sistema nervioso, toda la cosa interna. Primero recorro las historias, las imagino. Cuando son casas muy antiguas, tomo en cuenta que han sido habitadas por muchas vidas, por varias personas".
Respecto al estilo narrativo, relativizó su concepción en función de la interpretación de cada lector o lectora: "a algunas personas sensibles por ahí les provoque un poco de terror, para otras el género puede ser fantástico. A cada lector le pega de una forma distinta y es quién termina de escribir el libro en cierta forma, porque deposita sus propias vivencias, aporta su fantasía, imagina los personajes, el lugar, le da color".