El humorista y actor Dady Brieva dio detalles de su espectáculo "Super Dady. El mago del tiempo", que está presentando en la costa bonaerense hasta el mes de febrero.
Desde La Lucila del Mar, le dio una entrevista al equipo de “Con quién hay que hablar”, por Radio Provincia, donde también se refirió a sus rutinas durante la temporada. En ese sentido, reveló que todas las mañanas sale a caminar por la playa: “Lo bueno de La Lucila es que si bien hay mucha gente, como la playa es tan ancha, permite caminar sin tocarse”.
Consultado sobre cómo fue el brindis de fin de año que compartió con la vicepresidenta Cristina Fernández y otras figuras de la política y el espectáculo, indicó: “Fue muy lindo verla. Ella habló, estuve con ella en la mesa y la escuchamos y tratar de adivinar hacia dónde vamos, porque desde la tribuna las cosas se ven diferentes”.
Seguido, dijo que con El Mago del Tiempo ofrece “una serie de monólogos con los que recorrí dos veces el país. Después nos agarró la pandemia y me negué a hacer streaming. Hay mucha gente que lo hace, los aplaudo y envidio”.
“El año pasado empezamos con el 30% de aforo, después 50%. Los protocolos del teatro son muy estrictos”, destacó el humorista. Agregó: “Pase sanitario, alcohol, barbijo, si querés ir al baño los acomodadores te acompañan. La verdad, me saco el sombrero por el comportamiento del público, porque no es una cosa menor”.
“Lo importante es que la gente se tome sus merecidas vacaciones, después de haber aguantado esta pandemia”, opinó el entrevistado.
“El humor sirve para sanar, para cicatrizar. Yo me río de cuando nos cagaban a palos y no estaba el INADI para denunciar, hasta las maestras nos hacían bullying”, señaló Dady y admitió: “La corrección política es una materia que me llevo a marzo todos los años, nunca me voy a empachar por no decir algo que siento”.
Finalmente, remarcó: “Que un kirchnerista se prive de ver a Luis Brandoni me parece estúpido, el artista va por otro lado”. En ese marco, aclaró: “Con Miguel del Sel somos hermanos, en 2023 vamos a cumplir 40 años. Ya éramos antes de Macri y de Cristina”.
“Me parece piola saber que cada uno piensa lo que piensa y listo. Ya no me peleo como antes, quiero que mis hijos tengan salud, la tercera dosis, los triglicéridos y ya está. Se terminó la pelea”, concluyó.