Emilio Ruchansky, periodista y editor adjunto de la Revista THC, que se especializa en la cultura cannábica reflexionó sobre la droga envenenada, que llevó a la muerte a más de 20 personas en los últimos días y destacó que con la penalización de la tendencia los adictos están entre “la cárcel o la muerte”.
En No Corras, por FM 97 UNE el autor del libro “Un mundo con drogas” aseguró: “ante la noticia me quedé estupefacto, como la mayoría. Nunca había pasado una cosa así, con esta magnitud. Además, pensé en la despenalización del consumo. Hay tres personas que se murieron en su casa o la calle ante el miedo de ser judicializadas. Estamos con esta opción de la cárcel o la muerte”.
Además, el integrante del Acuerdo por la Regulación Legal del Cannabis agregó que sintió “mucha bronca porque hace año que pedimos la despenalización de la tenencia pero no hay valentía política. De hecho, la Corte ha sido más valiente que los políticos con el Fallo Arriola que despenaliza, la tenencia de cualquier sustancia, despenaliza la conducta y no la droga.”
Ruchansky resaltó que “no se puede seguir penalizando la tenencia porque esto genera una guerra sin fin, como pasó en México”. Y aclaró que “luego de la Convención de 1961, que es la piedra fundacional del prohibicionismo, Holanda, salió del tratado y volvió a entrar con reservas, cosa que le permitió su venta en los coffe shops”.
“Allí se entiende que la puerta de entrada a las Drogas no es la marihuana sino el dealer. Y entonces, si vos evitas que la gente vaya a un dealer a comprar marihuana, evitás que consuma sustancias más nocivas. Y después hubo que esperar hasta el 2012 donde Uruguay lanza la regulación y algunos estados de Estados Unidos, a partir de plebiscitos ganan también una regulación” relató y señaló que “España tiene un modelo de autocultivo que sigue hasta hoy y que permitió sacar a mucha gente de la clandestinidad”.
Por otra parte, el periodista especializado señaló que “hay un estudio de la OMS que determinó que el uso recreativo de la cocaina, si bien afecta a la salud no es un problema epidiemiológico” y aclaró que el documento no se terminó de presentar oficialmente porque Estados Unidos se opuso y amenazó con quitar financiamiento a la organización.
Y, aclaró: “Igual esto no es lo que consumieron estos chicos. Hemos llegado a esto por el tema de la prohibición. La prohibición genera sustancias adulteradas y caras. Cualquier mercado regulado terminaría con eso. Yo creo que está difícil la regulación de la cocaína porque ningún país lo hizo. Pero, no me parece imposible hablar de la regulación del cannabis, teniendo a Uruguay al lado como una forma de empezar a salir de este encierro.”
Rusconi, además reflexionó sobre la importancia de “hacer una nueva ley de adicciones para poder hacer internaciones compulsivas ordenadas por un equipo interdisciplinario” y destacó: “Hay que empezar a poner planta en el presupuesto en Salud Mental. Pues, debería ser el 10 por ciento del presupuesto de Salud pero hoy no llega al 1 por ciento”
Denunció que hay sectores vinculados a determinadas comunidades terapéuticas vinculadas a la iglesia, “que quieren frenar la despenalización porque quieren que continúe el tratamiento coactivo. Por eso para ellos, hoy su enemigo es la Ley de Salud Mental más que la Ley de Drogas”.
Y aseguró que "hay una regulación ilegal de parte de la policía, y esto pasa en muchos países. Es la polícía con la anuencia del poder judicial y político la que regula este mercado. Y es muy difícil sacarle un a caja así a la policía. Por eso me pareció muy valiente que el ministro de Seguridad, Sergio Berni, haya hablado de la desfederalzación del delito y haya pedido que sea la Federal y no las policías provinciales las que investiguen eso".
Finalmente, ponderó las declaraciones del ministro, que pedían a quienes haya comprado estupefacientes que los descarten. “Es lo que hay que hacer. Es lo que se hace cuando vos tenes un sistema de alertas tempranas y permitís que la población consumidora testee drogas” aclaró.