El director ejecutivo de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), Andrés Nápoli, destacó la importancia de que se debata sin dilaciones el proyecto de Ley de Humedales debido a que sus funciones ecosistémicas posibilitan “nuestra forma de vida”. El dirigente explicó que “no es” una norma prohibicionista sino que, por el contrario, “nos va a permitir ordenar el territorio” por cuanto “no se puede hacer ganadería en todos lados ni rellenar todos los territorios”. En ese marco, rechazó la intención del Consejo Federal de Medioambiente de iniciar un nuevo proceso de consulta porque la iniciativa se debatió durante un año en el Congreso, lo que posibilitó unificar posiciones. “Si estamos empezando de nuevo es porque no hay intención de tratarlo” de parte del Poder Ejecutivo, advirtió.
En declaraciones a No Corras por FM 97UNE, sostuvo que “los humedales son ecosistemas que están distribuidos en todo el país. Tenemos en el Litoral, en Jujuy, en la Patagonia, en la provincia de Buenos Aires. Son superficies donde la manifestación principal es que tienen un sustrato de agua, que puede ser permanente o transitoria”. Nápoli dijo que “estas tierras no se presentan como áreas protegidas sino que son superficies donde se realizan muchas actividades”. No obstante, aclaró que “hay que protegerlo del descuido y de la depredación, ya que muchas veces escuchamos que son pantanos que hay que rellenar, avanzar con la agricultura o con actividades inmobiliarias, o transformarlos en tierras productivas”. El especialista agregó que existe el concepto que plantea que “si no sirve para producción es como que no sirve para la persona humana, cuando los humedales tienen funciones, muchas de las cuales permiten nuestra forma de vida, por ejemplo, regulando las inundaciones”. Asimismo, el titular de FARN sostuvo que “son esponjas que evitan que el agua venga en aluvión”. A la vez, subrayó que “tienen funciones ecosistémicas, albergan hábitat y generan actividades múltiples, por lo que es necesario prestarles atención y avanzar en esta regulación que tiene muchos años de espera”.
Respecto de la intención del Consejo Federal de Medioambiente de debatir una nueva propuesta de ley, Nápoli reiteró que “el año pasado hubo un dictamen unificado de más de 15 proyectos en la Comisión de Ambiente de Diputados y eso no avanzó. Se pidió que el Poder Ejecutivo lo incluyera en sesiones extraordinarias y no lo hizo. Ahora quiere iniciar un nuevo proceso de consulta pero ya hubo un año entero de debate público en el Congreso, donde se unificaron muchísimas posiciones”. Por lo tanto, denunció que “si estamos empezando de nuevo es porque no hay intención de tratarlo”. En ese sentido, reclamó que se tome ese dictamen y se avance desde allí hacia otros espacios de debate porque “tiene que pasar a la Comisión de Agricultura donde empieza el lobby agrícola y ganadero, y después a la Comisión de Intereses Marítimos donde empiezan otros lobbys”. “El proceso es larguísimo”, reconoció. “Aprobar una norma que proteja el ambiente cuesta casi una década y sancionar una que lo destruya menos de meses”, lamentó.
Nápoli reveló que “el lobby no tiene una visualización” pero que “se hace presente en el momento de firmar un dictamen donde no aparecen quienes tienen que hacerlo; en el momento de la discusión en el recinto con cláusulas que nunca estuvieron en debate y desnaturalizan el proceso; o aparecen en el momento de ser sancionada la norma para no reglamentada; o una vez que está reglamentada para evitar la puesta en práctica”.
El militante ambientalista resaltó que “no es una ley de prohibiciones. Es una ley que nos va a permitir ordenar el territorio. No se puede hacer ganadería ni rellenar todos los territorios. Necesitamos que esto le pueda explicar a un funcionario que tiene que tomar una decisión qué es lo que tiene que hacer con un humedal”.
Por último, indicó que “parece increíble que en Corrientes se están prendiendo fuego los Esteros del Iberá. Se trata de fuego sobre un espacio de agua”.