Pavlovsky explicó que esta situación se convierte en un problema "cuando empieza a ocupar un lugar central y reemplazar otras fuentes de placer y vínculos".
A su vez recordó que "después de 30 años, el principal sistema de clasificación de enfermedades mentales, recalibra y trata de incluir nuevas problemáticas".
Explicó que como "las adicciones ocurren a través de sustancias o conductas compulsivas (...) no está mal incluir dentro de las clasificaciones a esta entidad, porque así se le da visibilidad para que los sistemas médicos y psicológicos puedan estudiar estos problemas con tratamientos específicos".
Pavlovsky distinguió de las personas que lo hacen "de manera responsable y lúdica", de aquellas que "reemplazan su vida personal sin salir", donde "hay un desorden mental".
Por último, dijo que como padre considera que es "difícil competir con las pantallas; el rol es tratar de regularlo, decir que no es imposible porque todo esta mediado por la tecnología".