Oscar Jorge García, de 92 años, falleció este lunes por coronavirus tras permanecer varios días internado en el Sanatorio Otamendi. El caso generó gran controversia luego de que un juez ordenara a la clínica suministrarle dióxido de cloro, por impulso de la familia y su médico particular.
En tanto, el abogado resaltó que “el Sanatorio se negó a aplicar la práctica médica "por lo cual lo hizo su médico personal y hubo avances favorables en su estado, presumimos, como consecuencia del tratamiento”.
Por último, aseguró que "no está prohibido el uso del dióxido de cloro. Hay una resolución de la ANMAT del 2019 que establece un mecanismo de excepción en cuadros clínicos severos, para tratamientos paliativos aun con medicamentos contraindicados”.