El sociólogo Ricardo Rouvier analizó el discurso del presidente Alberto Fernández durante la apertura de las sesiones ordinarias, así como el escenario político que atraviesa el país. En declaraciones a No Corras manifestó que “hay un contexto de alta complejidad en términos de la condición socioeconómica de la Argentina, de algunos problemas macroeconómicos de difícil resolución como la inflación y la situación de las coaliciones tanta oficialista como opositora”. En ese marco, manifestó que el Jefe de Estado “dirigió gran parte de su discurso a su propia coalición. Es decir, a cerrar filas alrededor de una agenda que incluye la aprobación de lo realizado y las negociaciones con el FMI”.
Por FM 97Une señaló que el gobierno se encuentra en una encerrona porque “hay que pagar la deuda y mantener la inversión para que haya crecimiento económico” y ambas tareas “plantean la necesidad de recursos que no tenemos. La realidad es muy dura”, agregó. De todos modos, destacó que el entendimiento con el organismo “permitiría que recibamos el dinero para pagarle al propio Fondo y no habría algo disruptivo dentro del FdT como serían las reformas estructurales”. De todos modos, reconoció que “es una situación compleja porque hay que caminar por el borde del default”.
Por otro lado, Rouvier destacó que Alberto Fernández lanzó “un claro mensaje hacia los puntos de crisis sobre el conflicto del gobierno con la oposición, el gobierno de Macri, la Corte Suprema, etc” y subrayó que “esto se enfrenta con política, la cual tiene una durísima prueba para llevarlo adelante, y que le permite salir de una situación de encierro que se complicó más con la crisis internacional”.
El analista señaló que “la lucha política es una disputa de lenguajes”. En ese sentido, explicó que “el gobierno tiene un conflicto con el Poder Judicial mientras que la opinión pública viene cuestionando a la justicia desde hace muchísimos años”. Sin embargo, aclaró que “la mayoría de la población desconoce cuál es el motivo de la pelea del gobierno con la Corte Suprema y, por lo tanto, no acompaña al Ejecutivo como éste quisiera que lo acompañara”.
Asimismo, sostuvo que “hay una ley de comunicación que habla del factor tiempo. A medida que pasa el tiempo la percepción de la opinión pública cambia y lo que predomina en ese cambio es la actualidad”. En ese sentido, consideró que “la estrategia comunicacional del gobierno ha sido errada desde el primer momento” y recalcó que “los políticos creen que con su comunicación es suficiente pero eso no es verdad”. Al mismo tiempo consignó que “el presidente envió una señal de relanzamiento de su gobierno y me pareció muy bien. Creo que tiene que ser relanzado y cambiar a una parte de sus figuras. Pero a medida que pasen los días, la actualidad va a ser cada vez más importante porque tiene que ver con la cultura de la inmediatez”.
Por último, explicó que “en el Frente de Todos, el gobierno y el pan-peronismo falta una pieza y es la conducción. Hay líderes parciales pero se necesita una conducción. El kirchnerismo abunda en la parcialidad y esto te lleva a que tenga el 30% de los votos y sea competitivo electoralmente, pero no siempre. Hay que romper la parcialidad e ir a una totalización como lo pensó Perón”.